En el capítulo destinado a mejorar la calidad democrática en Extremadura se contempla la reducción de la administración regional, la desaparición del Consejo Consultivo y una bajada del Presupuesto de la Asamblea en un 25% (actualmente, es de 14,5 millones).
La propuesta de Vara pasa por reducir de 7 a 5 las consejerías, bajar el número de direcciones generales y centralizar servicios comunes para diversas consejerías (por ejemplo, el de compras).
Más medidas de regeneración democrática: Una persona, un cargo público; comparecencia de todos los cargos públicos en la asamblea antes de su nombramiento; publicación de todos los contratos públicos al día siguiente de su firma, reducir al 1% el número de electores necesarios para una iniciativa legislativa popular…
Algunas de esas medidas entrarían en vigor desde el primer minuto de la legislatura y el resto antes de los seis primeros meses.