Unidas por Extremadura se opone a implantar el peaje en las autovías y su portavoz, Irene de Miguel, cree que la propuesta “es un error tremendo y perjudica a la clase trabajadora extremeña”, una medida “regresiva” y “absolutamente discriminatoria”.
Para poner medidas como esta de fiscalidad verde “debería de haber un sistema de transporte público sólido, que conecte y vertebre el territorio”.
De esta forma, Unidas por Extremadura se sitúa en la misma línea que Unidas Podemos estatal, quien ya se ha mostrado contrario a esta medida de extender los peajes a todas las autovías.
Para el grupo parlamentario extremeño esta medida va en contra de los intereses de la mayoría social de la región.
“Con la excusa de la fiscalidad verde no se pueden imponer copagos a la ciudadanía, algo que sentaría un peligroso precedente y ha añadido que ”la enésima crisis, esta vez climática, no la puede pagar de nuevo la clase trabajadora“.
Qué hará la Junta
El Gobierno central, en el plan de recuperación enviado a Bruselas y que se nutrirá principalmente con préstamos gestionados por la Unión Europea, se ha comprometido a aplicar los peajes progresivamente a partir de 2024, pero desea que haya por parte de las comunidades autónomas las mismas medidas en las autovías que son de ellas.
Hay dos en Extremadura, sobre las que la Junta tendrá que decidir, la EX-A1Navalmoral-Plasencia-Moraleja y la EX-A2 Miajadas-Vegas Altas (Santa Amalia)