Cinco investigados por parcelar y construir en suelo rústico de San Pedro de Mérida
La Guardia Civil ha instruido diligencias a un promotor que, a sabiendas de su ilegalidad, constituyó una parcelación urbanística en suelo rústico de San Pedro de Mérida (Badajoz), así como al constructor y tres propietarios por edificar cuatro inmuebles en el lugar sin licencia de obras.
En el marco de la operación 'Insidias II', se les investiga como presuntos autores de un delito sobre la ordenación del territorio y el urbanismo, según ha informado este viernes la Benemérita. La investigación se inició cuando el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil tuvo conocimiento de la existencia de construcciones de edificaciones supuestamente no autorizadas en los extrarradios de esta localidad pacense.
Con las indagaciones e inspecciones llevadas a cabo en la zona, corroboraron las “condiciones ilegales” llevadas a cabo en las obras de infraestructuras para la urbanización de la parcelación. Entre ellas figuran una división perimetral con vallado, la red de suministro de agua potable y las obras de un camino de acceso a las parcelas constituidas, así como cuatro edificaciones aún en construcción en un terreno calificado como suelo rústico, no urbanizable.
La persona que tomó la iniciativa como promotor principal fue un vecino de San Pedro de Mérida, quien adquirió una parcela catastral de unas dos hectáreas de plantación de olivo y eliminó este cultivo para adecuar el terreno en su futura urbanización. Dividió el terreno en diez subparcelas, a las cuales dotó de canalización de agua potable y camino de acceso, procediendo a la venta de algunas de las mismas a otras personas vecinas de la misma localidad o proximidades.
Tanto el promotor, como otros tres propietarios, promovieron a su vez las obras de construcción, sin licencia de obras, de cuatro edificaciones con posible destino a casas de campo y asueto.
Tras recabar información en el Ayuntamiento de San Pedro de Mérida y en la oficina de gestión urbanística y del territorio, vivienda y arquitectura de la Mancomunidad Integral de Municipios Centro, se comprobó que el terreno donde se habían llevado a cabo tanto la parcelación, como la construcción de cuatro edificaciones, estaba calificado como suelo rústico.
La Ley de Ordenación del Territorio y el Urbanismo Sostenible de Extremadura, ha recordado la Guardia Civil, prohíbe la parcelación urbanística en suelo rústico y responsabiliza del delito a los promotores, a los constructores y a los técnicos directores que lleven a cabo obras de urbanización, construcción o edificación no autorizables.
Asimismo, establece que la autoridad judicial podrá ordenar, a cargo del autor de los hechos, la demolición de la obra y la reposición a su estado originario de la realidad física alterada, sin perjuicio de las indemnizaciones debidas a terceros que hubiesen actuado de buena fe.
Ante estos hechos, el Seprona ha recomendado que antes de adquirir parcelas rústicas a precios económicos o supuestas condiciones atrayentes se recabe información acerca de los planes de urbanización de los respectivos municipios, así como obtener las oportunas licencias urbanísticas antes de la ejecución de las obras que se pretendan llevar a cabo.
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