“Mi hermano Pablo tenía 43 años y dos hijos. Ha muerto tras ser atropellado por un conductor que había consumido drogas y alcohol y que ha pasado en la cárcel la ridícula pena de un mes”, ha escrito Ismael Martín Vázquez en la recogida de firmas que ha iniciado en Change.org y que cuenta ya con más de 85.000 apoyos.
“Sus hijos y su familia no vamos a volver a verle, nunca más. Sin embargo, el conductor y culpable ya está libre. Treinta días después”.
La familia de Pablo Jesús, fallecido el pasado 22 de marzo dos días después de ser atropellado en la carretera entre Segura de León y Fuente de Cantos, al sur de la provincia de Badajoz, solicita modificar el Código Penal “para endurecer las penas de los homicidios producidos por conductores como consecuencia de su consumo de drogas y/o alcohol”.
Y que las penas “se apliquen de forma íntegra”.
El conductor que atropelló a su hermano y a otro compañero ciclista, lamenta Ismael, “no se quedó a socorrer a las víctimas, que todavía estaban vivas, sino que se marchó de allí arrastrando de su coche la bici de mi hermano. Después dio positivo en el control de drogas y alcohol”. El impulsor de la petición recuerda que su hermano murió dos días después “por las fatales heridas causadas por el brutal impacto”.
“Con 43 años, ha dejado viuda a su mujer y huérfanos a una niña de 14 años y a un niño de 9. El conductor, quien se puso al volante habiendo consumido drogas y alcohol, ha pasado un mes en la cárcel y salió en libertad el mismo día en que se cumplía un mes del fallecimiento de Pablo. No es justo que una muerte como la de mi hermano resulte tan absurdamente barata a quien la provocó. Ni que esto haya pasado con cientos de víctimas y sigamos igual.”
Esta campaña a favor de modificar el Código Penal se une al movimiento creado anteriormente por los familiares de otras víctimas, que en 2018 presentaron una propuesta en el Congreso de los Diputados en ese sentido.