Este curso académico trajo consigo la entrada de un banco a las aulas de la educación pública. Su objetivo, impartir una materia denominada ‘Educación financiera’ a cargo del BBVA, gracias a un acuerdo firmado entre la Junta y esta entidad. Comenzaba así un programa similar al que hay en comunidades como Canarias, Cantabria o Castilla La Mancha.
El acuerdo no está exento de polémica. Sus detractores entienden que se trata de una “injerencia” de un banco en la educación pública extremeña. Así lo explica el Colectivo Cala, que ha impulsado la campaña ‘A mí el BBVA, no me educa’ desde que tuvo conocimiento de este acuerdo.
Según los datos que maneja este colectivo, en contacto constante con docentes de la educación pública extremeña, el acuerdo suscrito entre Monago y el BBVA ha llegado este curso a unos 300 alumnos de cuarto de Educación Secundaria Obligatoria y Bachillerato.
Habrían sido en torno a 39 talleres en seis centros (una media de 6-7 sesiones por centro), en los IES Ciudad Jardín, Bárbara de Braganza, San Roque y Castelar de Badajoz; así como el AlQazeres de Cáceres, y Sáenz de Buruaga de Mérida.
Y todo son hipótesis, no se manejan datos oficiales porque no se la ha facilitado “en ningún momento”, según critica Miguel Ángel Esquembre, del Colectivo Cala. Denuncia el ‘oscurantismo’ que han encontrado a la hora de acceder a la programación que han recibido este año los estudiantes de la región.
Eso sí, conocen por ejemplo el encabezamiento de algunos de los talleres: “Endeudarse con sensatez”, “Las dudas cotidianas de Jaime”, “Inversión inteligente”, “Finanzas para la vida” y “Finanzas en familia”.
El colectivo Cala también ha podido confirmar que el Ejecutivo de José Antonio Monago tiene previsto continuar el programa con el banco el próximo curso. Ya durante este año animaron a padres y profesores a desobedecer. Y de cara al nuevo periodo escolar, les piden de nuevo que no permitan que en su centro educativo el BBVA “haga publicidad gratuita de un tipo de educación financiera que es causante de esta crisis”.
Aclara que no están en contra de que los alumnos reciban educación financiera, aunque sí pone en entredicho el valor ético de permitir a un banco que desembarque en la educación pública. “Son pasos que se dan, que se van normalizando, y que va abriendo las puertas, silenciosamente”, lamentan.
Motivos para desobedecer
Entre los motivos que llevan a justificar la desobediencia, la campaña ‘A mí, el BBVA no me educa’ pone de manifiesto que esta entidad es uno de los bancos que “más desahucios practica en todas partes”, “desde jubilados a invidentes… el BBVA no discrimina”; así como que “opera en paraísos fiscales a través de filiales”. Así lo explica en una recogida de firmas por Internet puesta en marcha a través del portal 'Change.org'.Así lo explica en una recogida de firmas por Internet puesta en marcha a través del portal 'Change.org'.
“Ya que, como señala el convenio, apuestan por una educación financiera y uno de sus temas es el ahorro, no estaría mal que opinaran sobre las cláusulas suelo y por qué no las consideran abusivas cuando ya hay sentencias de tribunales que así lo declaran”.
“Apoya a través de diversos productos financieros a empresas de armas que producen bombas, explosivos, misiles, armas nucleares y de uranio empobrecido, entre otros”.
También afirma que el BBVA “ha financiado proyectos que generan graves impactos socioambientales”, y que sus empleados se quejan de las condiciones laborales.