El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, ha pedido a los futuros médicos su implicación en la lucha contra la violencia machista y el maltrato infantil. Les ha instado a que no duden en tomar medidas ante cualquier sospecha que tengan en el ejercicio de su trabajo.
Fernández Vara ha hecho esta petición en su discurso en la graduación de la XXIX Promoción de Medicina y la III Promoción de Grado de la Facultad de Medicina de Badajoz, un acto que también ha contado con la presencia del consejero de Sanidad y Políticas Sociales, José María Vergeles, entre otras autoridades.
“Os ruego que si en vuestro ejercicio profesional tenéis la más mínima sospecha de que una mujer puede estar siendo maltratada no os calléis”. Ha insistido en que lo mismo deben hacer frente a posibles casos de maltrato infantil.
“Grandes hombres y mujeres”
El presidente extremeño ha felicitado a los jóvenes que se han graduado y ha valorado su capacidad de reflexión y pensamiento crítico, al tiempo que les ha recordado que la medicina es una profesión muy exigente en la que no solo sirve con contar con conocimientos médicos, sino que es clave ser 'grandes hombres y mujeres'. Ha apuntado que la sociedad necesita liderazgos sociales y en estos tiempos también personas como ellos pueden ejercerlos.
Ha defendido el secreto profesional y ha abogado por llevarlo al máximo lugar para que nunca se pierda la relación de mutua confianza entre el paciente y el facultativo. El Palacio de Congresos Manuel Rojas de Badajoz ha acogido este acto en el que se han graduado un total de 144 alumnos de la Facultad de Medicina.
“Médicos que traten enfermos, y no enfermedades”
En su intervención, el presidente del Colegio de Médicos de Badajoz, Pedro Hidalgo,ha recordado a los graduados que el desarrollo de la Medicina es “más que una licenciatura, ya que se trata de un pacto social con la comunidad para servirles y ayudarles”. Ha dicho que la sociedad actual demanda “médicos que traten enfermos y no enfermedades, comprometidos con el paciente y mirando por los recursos para aplicarlos con eficiencia y equidad”.
“Del médico actual se espera humanidad y compasión porque el enfermo tiene puesta todas sus esperanzas en nuestro colectivo, que debe alejarse de la medicina defensiva ante el temor de equivocarse o de presiones externas”. Les ha animado a “a trabajar en colaboración con vuestros pacientes y respetar sus derechos, mostrando siempre una actitud compasiva y humana ante el prójimo”.