Cuando la tecnología te permite trabajar debajo de una encina: 14 empresas y 70 trabajadores se instalan en la provincia de Cáceres

La idea era atraer a grandes empresas instaladas por toda la geografía española cuyas estructuras permitieran el teletrabajo para que sus trabajadores o parte de ellos se trasladaran a municipios de menos de 20.000 habitantes de la provincia de Cáceres. De momento eso no se ha conseguido, pero sí se ha logrado que 14 empresas tecnológicas extremeñas, unas ya constituidas y otras de nueva creación, y 70 trabajadores se hayan beneficiado del programa “Cáceres Destino Digital”, promovido por la Diputación Provincial de Cáceres, con una inversión de 235.000 euros, y que se ha llevado a cabo en las anualidades de 2021 y 2022.

El objetivo era el de fomentar la relocalización de grandes empresas en el entorno rural de la provincia; propiciar el teletrabajo; la creación de coworking (centros de trabajo compartidos) y llevar a cabo formación tecnológica en municipios menores de 20.000 habitantes.

El diputado de Innovación y Provincia Digital, Santos Jorna, ha hecho balance de estas ayudas, puestas en marcha en 2021, con las que se quiere “marcar una hoja de ruta” y conseguir que empresas que, hasta ahora trabajaban desde las grandes ciudades, lo hagan en estos municipios más pequeños.

Se trata de empresas del sector tecnológico, relacionadas con la industria del software, el sector auxiliar del software, el marketing digital o la industria 4.0, entre otras.

En 2021 fueron 4 empresas las beneficiarias de este sistema de ayudas a la relocalización de empresas y servicios tecnológicos en municipios de menos de 20.000 habitantes, y 17 personas beneficiadas, con una inversión de 85.000 euros, mientras que, en 2022, fueron 10 empresas, 53 personas y una inversión de 150.000 euros.

El objetivo, según ha detallado Jorna, es asentar población en el medio rural, teniendo en cuenta que “es un sector al alza, que genera continuamente empresas y empleo”

En este sentido, se ha referido a los datos de la Encuesta de Población Activa que apuntan que, en 2020, en la provincia de Cáceres, 1.489 personas trabajaban en empresas del sector tecnológico; en 2021, 2.820 personas, “un aumento de más del 90%”, y en 2022, 4.009 personas, “es decir, casi tres veces más que en 2020”.

Así, el programa ha contado con ayudas para la relocalización de empresas y servicios al mundo rural, dotado con 5.000 euros por cada persona trasladada al nuevo centro o nueva contratación, con un máximo de cinco personas por empresa, a la que se han acogido 7 empresas y 27 trabajadores, de Hervás, Trujillo, Miajadas, Malpartida de Plasencia, Carcaboso, Arroyo de la Luz y Coria.

Otra línea ha sido para el fomento del teletrabajo en el entorno rural, desde sus domicilios, como desde centros coworking, siendo requisito indispensable pasar a empadronarse en un municipio menor de 20.000 habitantes de la provincia. A ella se han acogido dos personas de dos empresas, de Castañar de Ibor y la alquería de Castillo, de Pinofranqueado.

Respecto a los centros de trabajo compartidos en este entorno, a través de esta línea, se ha abierto un centro en Malpartida de Plasencia con punto de acceso al Metaverso, dotándolo con dispositivos de realidad virtual a disposición de los usuarios.

Con la última línea de ayudas, destinada a la generación del talento, a través de formación para la especialización o la recualificación en el mundo rural, dotadas con 20.000 euros, han sido beneficiadas cuatro empresas en Trujillo, Miajadas, Jaraíz de la Vera y Malpartida de Plasencia.

Trabajo para los vecinos discapacitados

Gracias a este programa la Empresa extremeña Fitex, que pertenece al grupo empresarial Ilunion, ha conseguido crear en Jaraíz de la Vera y en Miajadas, sendos Centros Rurales de Atención al Cliente (CRAC), donde se han conseguido dar trabajo a los vecinos con discapacidad de ambas localidades.

Estos centros entran dentro del proyecto “Raíces”, que pretende propiciar la igualdad de oportunidades laborales entre quienes viven en un entorno rural y tienen alguna discapacidad.

Vigilancia de fotovoltaicas con drones y comercio digital

Otras de las líneas de ayuda de “Cáceres Destino Digital” también han “encajado a la perfección” con las necesidades de la empresa “Solardrone”, que se dedica al control de plantas fotovoltaicas mediante la utilización de drones. “Necesitábamos formar pilotos, y la línea de ayudas destinada a la recualificación nos ha venido muy bien para poder ofrecer esa formación, ahora tenemos previsto contratar, como mínimo, a tres personas más, que se sumarán a la plantilla de, entre 8 y 15 trabajadores, según el momento, que tiene esta empresa con sede en Trujillo, desde 2017.

Sílice S.L es otra empresa que también se ha beneficiado de las ayudas de este programa, con el que han podido ofrecer recursos informáticos y de software al comercio local de pequeñas poblaciones para facilitarles nuevos canales para la venta en remoto. Han ayudado ya a cerca de una veintena de comercios, y esperan poder seguir haciéndolo. Para ello, han contratado a un técnico en Arroyo de la Luz, que dará soporte a los comercios que utilizarán las nuevas herramientas, informa Juan Antonio Hurtado, representante de Sílice.

¿Un Cáceres Valley será posible?

Si en tres años se ha conseguido triplicar el número de personas que trabajan en el sector tecnológico en la provincia cacereña es muy posible que, de continuar este ritmo, la provincia se convierta en un destino digital, que permitirá trabajar con cualquier parte del mundo hasta debajo de una encina.