El presidente regional, Guillermo Fernández Vara, ha rechazado hoy un concierto económico como los cupos vasco o navarro para Cataluña porque “uno se puede sentir español como quiera, se pueden tener dos lenguas pero eso no significa tener dos bocas”.
En un desayuno informativo organizado por Europa Press en Madrid, Fernández Vara dijo que se puede hablar de sentimientos “sin que eso implique más privilegios” y ha insistido en que si, al final, se trata de transformar sentimientos en privilegios, “entonces yo no estaré de acuerdo”.
Y en esa ausencia de privilegios, Fernández Vara ha apostado por un proyecto de país, “no hay que sacar de la chistera un conejo para Cataluña”.
El presidente autonómico también ha insistido en que España es una “democracia con complejos” y uno de esos complejos es creer que “España necesita un proyecto para Cataluña, cuando lo que precisa España es un proyecto de país”.
Fernández Vara está de acuerdo en la reforma de la Constitución pero en esa reforma no caben cambios en la financiación al estilo de equiparar a Cataluña con el País Vasco o Navarra, con conciertos económicos propios.
Gran pacto territorial
Por eso ha llamado a “un gran pacto” en el marco de la comisión parlamentaria para evaluar el modelo territorial, y construir ese gran proyecto que necesita España.
“La democracia no admite atajos” ha dicho Fernández Vara quien ha reiterado que hace falta hacer frente a los desafíos que España tiene por delante, “que no son pocos, y eso es algo que hay que resolver como país”.
A la pregunta de cómo valora los primeros diez de días de aplicación del 155, Fernández Vara ha asegurado que, a excepción de la situación judicial que va en paralelo, lo ve “con absoluta normalidad”.
La celebración de las elecciones es ya “incuestionable” y además la mejor solución.
Desde el primer momento “todos entendimos que el 155 era algo excepcional y si se limita en el tiempo, mejor para todos”.
“A nadie le gusta vivir en la excepcionalidad”, agrega Fernández Vara, que ha llamado a que todos tienen que poner de su parte para recuperar la normalidad.