Ayuso mete la pata en su visita a Galicia y las redes se burlan de sus conocimientos forestales y geográficos

El refuerzo de fin de campaña del PP en Galicia, Isabel Díaz Ayuso, aterrizó en Vigo directa de la Asamblea de Madrid. Allí había defendido que no era necesario trasladar a los mayores enfermos de covid de una residencia a un hospital porque, total, se iban a morir igual. En la ciudad olívica, donde también llaman “hijo de puta” al presidente del Gobierno -o, como dijo la todavía presidenta local del PP, “En Vigo también nos gusta la fruta”-, decidió pisar uno de los principales charcos relacionados con la gestión forestal en Galicia. El eucalipto, la polémica especie que sustituye a los árboles autóctonos, resultó ser, para ella, todo un atractivo. Tanto, que considera una “inmensa suerte” pasear entre sus montes. Lo dijo justo después de convertir a la ría de Vigo en una bahía, algo que sólo pasa en el nombre de hoteles o restaurantes que buscan darle un toque chic a su negocio.

El primero en compatirlo era el escritor y humorista Carlos Meixide. Los internautas no tuvieron piedad

Una de las sorprendidas fue la cantante Guadi Galego:

Rafa Cuíña, hijo del histórico delfín de Fraga, volvía por un mitin del PP y no pudo ocultar su sorpresa:

Para el escritor Diego Giráldez, Ayuso es algo así como otro Prestige

Y, junto a ellos, muchos internautas anónimos se sumaban a las críticas:

El refuerzo de fin de campaña del PP en Galicia, Isabel Díaz Ayuso, aterrizó en Vigo directa de la Asamblea de Madrid. Allí había defendido que no era necesario trasladar a los mayores enfermos de covid de una residencia a un hospital porque, total, se iban a morir igual. En la ciudad olívica, donde también llaman “hijo de puta” al presidente del Gobierno -o, como dijo la todavía presidenta local del PP, “En Vigo también nos gusta la fruta”-, decidió pisar uno de los principales charcos relacionados con la gestión forestal en Galicia. El eucalipto, la polémica especie que sustituye a los árboles autóctonos, resultó ser, para ella, todo un atractivo. Tanto, que considera una “inmensa suerte” pasear entre sus montes. Lo dijo justo después de convertir a la ría de Vigo en una bahía, algo que sólo pasa en el nombre de hoteles o restaurantes que buscan darle un toque chic a su negocio.

El primero en compatirlo era el escritor y humorista Carlos Meixide. Los internautas no tuvieron piedad