Colau y los alcaldes del cambio apelan a la movilización en Galicia para evitar “el lamento del día después”
La campaña electoral de En Marea tenía señalado este fin de semana en rojo. Tras unos primeros días de subidas y bajadas -de afluencia en los actos electorales, de tono de su candidato a la Presidencia-, la formación que encabeza Luís Villares fijó para este sábado sus primeros grandes mítines urbanos en las ciudades que, a priori, se presentan como trascendentales para aspirar a un buen resultado el 25S, A Coruña y Vigo. En las plazas coruñesa y viguesa Villares se presenta al electorado con el que la formación esgrime como principal aval, los alcaldes de las mareas. Con Xulio Ferreiro, Martiño Noriega y Jorge Suárez, y apoyado además por la regidora de Barcelona, Ada Colau. Todos ellos, casi a coro, apelaron a la movilización del electorado hacia el 25S.
En torno a un millar de personas han recibido a En Marea en los Jardines de Méndez Núñez de A Coruña. El encuentro ganó temperatura política cuando el alcalde compostelano lanzó la primera llamada a la tensión de la tropa. “Toca movilizarnos, hay una mayoría de cambio que no se puede quedar en casa para lamentarse al día siguiente”. “No quiero el lamento del día siguiente, no quiero el más mínimo lamento, toca movilizarse para que no nos escriban la historia”, ha apelado.
Noriega, como Ferreiro y Colau, han evocado sus propias experiencias electorales en las municipales de 2015 para afirmar que, también en esta ocasión, “es posible”. De momento, ironizó el alcalde coruñés, Alberto Núñez Feijóo ya actúa como el también popular Carlos Negreira antes de perder el poder herculino. “No necesitaba ir a debates, agachaba las siglas del PP en los carteles” y ahora “ya nadie se recuerda de él, excepto en algún juzgado”.
Con la atmósfera ya más caliente -puede que más que en ningún acto de la formación en lo que va de campaña- ascendió al escenario la también líder de Barcelona en Comú. “Tenéis la enorme responsabilidad no sólo de pelear por vuestro pueblo y por vuestra gente, también tenéis que enviar un mensaje para los pueblos del Estado. Tenéis que chillar fuerte con miles de votos que hay marea”, invitó
Después de que tanto los alcaldes como los candidatos Antón Sánchez y Luca Chao lo presentasen como el próximo titular de la Xunta -se escucharon también los primeros gritos de “presidente, presidente”-, fue el turno de Villares. “Nosotros podemos compartir escenario con nuestros amigos y amigas” mientras que “Atila Núñez Feijóo”, de hacerlo, tendría que cederle protagonismo a Rita Barberá o a José Manuel Baltar.
“No os rindáis, salid, ocupad las calles, decidle a todo el mundo que tenemos un proyecto honesto y decente”, ha proclamado el cabeza de cartel en su discurso más enérgico en el que va de campaña. La movilización, asegura, puede dar lugar a “un país justo” en el que, por ejemplo, se apruebe un decreto de garantías sociales, regrese la gratuidad de los libros de texto, nadie tenga que “morir en casa” por falta de presupuesto sanitario o exista la “libertad” de usar el gallego en la escuela.
“No nos resignamos, estamos en pie ante los que están cansados”, ha afirmado el candidato y por eso “venceremos nosotros”, proclamó. En el equipo de Villares se da por seguro de que el trecho urbano de la carrera electoral puede condicionar toda la campaña e incluso la posibilidad de que exista o no un cambio de gobierno.