Nuevo giro en el caso Baltar. La jueza que instruye la causa de la presunta oferta de empleo a cambio de sexo, en la que José Manuel Baltar está investigado -antigua imputación- por presuntos delitos de cohecho y tráfico de influencias -sin descartar el de acoso sexual- acaba de decidir que comparezca con la misma condición el jefe de personal de la Diputación de Ourense, José Luis Suárez, también alcalde del Ayuntamiento de Monterrei por el PP desde las últimas municipales e hijo del anterior regidor del municipio.
En una providencia dictada el pasado 26 de abril, a cuyo contenido ha tenido acceso acceso eldiario.es, la magistrada Eva Armesto toma esta decsión después de “ver” el “contenido” de los mensajes telefónicos aportados a la causa por la denunciante -también investigada-. Esos SMS, publicados en exclusiva por este diario, son considerados relevantes por la jueza para la investigación. Por ese motivo, la mujer que denunció al barón del PP ourensano tendrá que hacer llegar su teléfono al juzgado para realizar un “volcado” de los mismos, dice la providencia.
La citación del jefe de personal de la Diputación se produce después de que, desde el estallido del caso, Baltar haya mantenido en todo momento que este es un asunto “estrictamente personal”, aseveración que ha combinado también con la advertencia de emprender “acciones legales” que por el momento no se han concretado. La declaración de Suárez está fijada por la jueza para el próximo 12 de mayo, apenas cuatro días después de que el propio Baltar ejerza, en su calidad de presidente provincial del PP, de anfitrión del congreso en el que Alberto Núñez Feijóo será reelegido como líder del PP gallego.
Determinante en la condena a Baltar padre
La relación del jefe de personal ahora investigado con la familia Baltar va mucho más allá de este caso. No en vano, su testimonio fue crucial en la condena a José Luis Baltar, padre del actual presidente provincial, por enchufar a 104 personas en la Diputación de Ourense justo antes del congreso del PP ourensano en el que, en enero de 2010, le cedió el liderazgo a su hijo.
Mientras el patriarca de la saga Baltar era aclamado por sus fieles -entre ellos, el padre del ahora imputado, también llamado José Luis Suárez- ante los juzgados de Ourense, el jefe de personal testificaba que, efectivamente, los enchufes se habían producido. “El presidente daba el nombre y el puesto” de las personas a las que había que contratar por “razones de urgencia”, dijo, según recogió entonces la sentencia. Previamente, Baltar lo había culpado a él de los hechos.
Tras la sentencia condenatoria contra Baltar padre -inhabitado por nueve años, pero ya jubilado- Suárez siguió ejerciendo como jefe de personal y ha continuado también en el puesto tras ser elegido alcalde de Monterrei, aunque Baltar hijo se opuso, en público y en privado, a que compatibilizara los cargos. En esta línea, tras revalidar la presidencia de la Diputación el pasado año José Manuel Baltar anunciaba la incorporación a la entidad de la figura de la dirección general de Recursos Humanos, un cargo de nueva creación con dependencia orgánica directa de la Presidencia que, en la práctica, supondrá situar una figura ejecutiva jerárquicamente por encima de Suárez.
Se trataba, explicaba entonces Baltar, de que en la institución trabajaran “los mejores”. En esta línea, a finales de diciembre abría el proceso selectivo, que todavía está en curso y en el que participan siete personas. El nombramiento de la persona titular del nuevo puesto dependerá de una comisión de valoración de cinco miembros constituida el pasado marzo en la que también se sienta José Luis Suárez, quien ahora, en su calidad de investigado, podrá declarar ante la jueza Armesto sobre la política de personal de la Diputación con la asistencia de un abogado.