Pedro Sánchez dice que Podemos y Ciudadanos “ya están tardando” en impulsar un Gobierno alternativo

Inestable equilibrio el que ha empezado a transistar Pedro Sánchez en los mítines de la campaña gallega. El líder del PSOE ha desembarcado este sábado en la pequeña localidad de Cerceda (A Coruña) para revindicar la necesidad de un Gobierno apoyado en Podemos, al tiempo que ha cargado contra sus contrincantes de En Marea en el asalto a la Xunta de Galicia.

Un parque acuático bajo la lluvia en medio del rural gallego ha sido el escenario elegido por los socialistas para la primera aparición de Sánchez en campaña.

Durante su discurso, Sánchez ha definido al PP como un partido “sembrado de corrupción”. Según él, Alberto Núñez Feijóo siempre ha guardado silencio en los momentos de escándalo porque “también tiene cosas que ocultar”, en referencia a las fotografías que le sitúan de vacaciones junto al narcotraficante Marcial Dorado.

El secretario general del PSOE ha sido tajante: “Hay que mandar al PP a la oposición”, sin aclarar si ese deseo se refería al escenario político gallego o tenía un carácter más general.

A la hora de subirse al atril, la concurrencia recibía al del PSOE con gritos de “presidente, presidente”. Sánchez no les ha quitado la razón y en ningún momento ha dicho lo que asegura en las ruedas de prensa: que propone un Gobierno alternativo pero en realidad no se postula.

Para Ciudadanos y Podemos ha guardado el líder socialista parte de sus reproches: “Que levanten los vetos. Ya estamos tardando”, aseguró. Las referencias al retraso se producen sin que el PSOE haya descolgado todavía el teléfono para llamar a Albert Rivera.

En los inicios de la campaña gallega, la posición de Ciudadanos parece condenada a la irrelevancia. En Marea, sin embargo, se disputa con el PSOE la segunda posición entre el electorado. Dicho de otro modo, Podemos y PSOE son enemigos, pero también socios naturales. Algo parecido al Congreso de los Diputados.

En este contexto, Sánchez se ha referido a su contrincante calificándolo como “un conglomerado de siglas que se unen no se sabe para qué”. Si el PP no consigue la mayoría que le otorgan las encuestas, el PSOE, En Marea y el BNG tendrán que entenderse para formar un Gobierno alternativo. Por el momento, nada se dice en los discursos de ese posible acuerdo.

Tras los discursos, los socialistas gallegos han compartido con Sánchez una comida popular bajo la lluvia. Los parrilleros contratados para la fiesta ya trabajaban mientras el líder del PSOE desgranaba sus ideas sobre un pequeño escenario. Cuando el aroma a costillas de cerdo llegó a las primeras filas, Sánchez interrumpió el hilo para decir: “Con este olor a churrasco, cómo me iba a perder yo esta comida”.