El presidente de la Xunta titubea pero elude por ahora pedir responsabilidades a Baltar por conducir a 215 km/h

En la mañana de este miércoles, Alfonso Rueda ignoró en el Parlamento las preguntas al respecto de la oposición. No pudo, apenas unas horas después, escapar a las de la prensa. Incómodo y con algún titubeo, el presidente de la Xunta ofreció su apoyo a su homólogo de la Diputación de Ourense, José Manuel Baltar, cazado el pasado domingo a 215 kilómetros por hora al volante de un coche oficial del ente provincial. “El reconoce los hechos y abona esa sanción, que es una sanción administrativa, poco más que añadir”, intentó despechar Rueda el asunto.

En realidad la Guardia Civil investiga a Baltar por un presunto delito contra la seguridad vial, tal y como adelantó elDiario.es en la noche del martes. A Alfonso Rueda, aseguró, no le consta. “Desconozco todo eso, si es un delito o no. Hasta el momento sé que es a nivel administrativo. Para evaluar otros condicionamientos tendría que tener otro conocimiento”, dijo. El presidente añadió que “el primero que siente” lo sucedido es el propio Baltar, que “reconoció los hechos” al pagar la multa de 600 euros. ¿Le exigirá responsabilidades políticas? “Esto es lo que tengo que decir en este momento”.

Tampoco le parece más que una anécdota que fuese el además presidente del PP de Ourense quien manejaba el vehículo el pasado domingo. Según fuentes de la Diputación de Ourense, se dirigía a Madrid a reuniones oficiales el lunes cuando los agentes le dieron el alta en el municipio de Asturianos, en Zamora, en la autovía A-52. “Baltar conduce muchas veces los coches de la Diputación cuando va a actos oficiales. En Ourense lo sabe todo el mundo”, explicó con tono dubitativo. El Partido Socialista de Ourense afirma, sin embargo, que no figuraba ningún acto en Madrid en la agenda de Baltar.