La Televisión de Galicia paga al Arzobispado de Santiago casi 800.000 euros por ofrecer misas en el canal público
Están repartidas en nueve contratos firmados a lo largo del año 2022 entre la Corporación Radio y Televisión de Galicia (CRTVG) y el Arzobispado de Santiago de Compostela. Las cantidades suman en total 758.220,76 euros de ingresos para la Iglesia y están destinadas sobre todo a la retransmisión cada domingo de la misa en la TVG, aunque también hay partidas para una ceremonia especial en Semana Santa y para un programa sobre la Iglesia católica llamado Polo camiño da fe, que aborda semanalmente, con una duración de 15 minutos, asuntos como un campamento de verano para monaguillos o los milagros que los religiosos cuentan en O Cebreiro a los peregrinos que se acercan a la iglesia.
El año anterior –la plataforma de transparencia de la CRTVG permite únicamente consultar esos dos ejercicios– la cantidad para el mismo fin era sustancialmente inferior y rozaba los 21.000 euros repartidos en dos contratos: uno sellado en diciembre con la Provincia Eclesiástica de Santiago para cuatro capítulos de misa por 13.875,2 euros y otro de marzo para un especial de Semana Santa por 7.074 euros. Todas las cifras citadas son sin IVA.
En 2022, además de los fondos, se multiplicaron los capítulos incluidos en los contratos. Entre todos ellos son 137 episodios para retransmitir misas y 26 para especiales de oficios religiosos, de los que solo se concreta uno de ellos, el correspondiente al Jueves Santo. Además, hay dos contratos formalizados el mismo día, el 30 de septiembre, para un total de 52 capítulos del programa Polo camiño da fe. En este último caso, la cifra encaja con el número de domingos, el día de emisión, que hubo en 2022. Ni la CRTVG ni el Arzobispado de Santiago habían respondido, en el momento de elaborar esta información, a las preguntas sobre los motivos para el crecimiento de las aportaciones ni las razones por las cuales el número de capítulos de misas –excluidas las identificadas como especiales– es más del doble del total de domingos que hay en un año.
La información disponible en la página de transparencia no permite conocer el detalle de los contratos ni especifica con qué medios –con qué personal, la titularidad de los equipos necesarios– se hacen las retransmisiones, el periodo de vigencia de los acuerdos ni la justificación. Los documentos concretos no han sido aportados por la corporación pública, a pesar de haberle sido solicitados por esta redacción. En todos ellos aparece una descripción genérica: “otras producciones contratadas”.
En el caso del programa Polo camiño da fe, es público el dato de que está presentado y dirigido por María José Campo, que es una de las trabajadoras del departamento de comunicación de la Diócesis de Lugo. La Archidiócesis de Santiago de Compostela informó del nombramiento en octubre de 2021 a través de una página de actualidad llamada Pastoral Santiago. Antes que Campo, el responsable de conducir el espacio era el sacerdote Manuel Blanco, que es quien dice la mayor parte de las misas que se retransmiten los domingos en la Televisión de Galicia. Lo habitual es que sean las que se celebran en la iglesia de San Fructuoso de la capital gallega.
Entre 1.400 y 11.700 euros por misa
La suma de las cifras entregadas para las retransmisiones de misas parroquiales alcanza en 2022 los 191.565,6 euros, lo que arroja que el dinero por cada celebración es de casi 1.400 euros. Las especiales multiplican el presupuesto: de acuerdo con la documentación del año pasado, los contratos para estos eventos en fechas señaladas suman 303.135,88 euros, lo que arroja una media de 11.660 euros por cada una. Cada capítulo de Polo camiño da fe les supone a los medios públicos gallegos 2.400 euros de desembolso.
Los contratos del año anterior recogen una cuantía diferente por cada misa. El que incluye cuatro capítulos supone una aportación de la CRTVG de 13.875,2 euros, lo que deja la cifra por capítulo en 3.469 euros. El especial de Semana Santa incluye dos capítulos, a 3.537 cada uno de ellos.
La CRTVG tiene este ejercicio, el de 2023, un presupuesto de 126,7 millones de euros. En 2022 la corporación disponía de algo menos: 121,6 millones. De esta cifra, la mayor parte sale año tras año de las arcas públicas. En este caso, la transferencia de la Xunta ascendió a 114,5 millones de euros, el 94% del total. El resto son ingresos procedentes de publicidad –6,3 millones ese año–, según expuso en su momento en el Parlamento de Galicia el director gerente del área de gestión corporativa del ente público, Miguel Rodríguez Barrio.
Las que recibe a través de la corporación de radio y televisión gallega no son las únicas aportaciones públicas que ingresa en sus arcas la Iglesia católica en Galicia. La rehabilitación de la catedral de Santiago, declarada Patrimonio de la Humanidad, se nutrió en buena parte de fondos del Gobierno central y del autonómico, hasta rondar los 18 millones de euros. A ello hubo que sumarle la recuperación del Pórtico de la Gloria, financiada por una fundación, la Barrié. Además, un informe del Ayuntamiento de Santiago sugiere que la catedral no pagó sus principales facturas de luz durante décadas. La Xunta firma cada año convenios por los que entrega a la Iglesia dinero para gastos como los de seguridad o la organización de una peregrinación de la juventud católica que el año pasado llevó las tensiones de convivencia entre turismo y vecinos hasta la indignación de los residentes.
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