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El Ejército israelí ordena a los residentes de Ciudad de Gaza abandonarla antes de lanzar su segunda incursión terrestre

EFE

9 de julio de 2024 20:07 h

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El Ejército de Israel ha ordenado este miércoles a los residentes de la Ciudad de Gaza que abandonen la urbe, destruida después de los intensos bombardeos y combates de los pasados nueve meses, y se dirijan hacia el sur a través de lo que ha denominado “corredores seguros”. No es la primera vez que las tropas israelíes fuerzan el desplazamiento de los palestinos de la Ciudad de Gaza para entrar en ella con todos los medios y enfrentarse a los combatientes de Hamás, aunque en su primera operación en pasado mes de noviembre no consiguió eliminar la presencia del grupo islamista.

En un aviso en árabe, el Ejército israelí ha advertido a los habitantes que la Ciudad de Gaza “será una zona de combate peligrosa” y, por ello, deben marcharse hacia el sur, para encontrar refugio en Deir al Balah y Al Zuwaida, en el centro de la Franja. Asimismo, les ha instado a salir de la ciudad por dos “corredores seguros”, uno en el oeste, junto a la costa, y otro en el este, a través de los que pueden pasar “rápidamente y sin controles” de seguridad. Sin embargo, esos corredores seguros establecidos por Israel han demostrado no serlo en ocasiones anteriores.

El Ejército lleva días desarrollando operaciones en la Ciudad de Gaza, en concreto en el barrio de Shejaiya, donde ayer fueron eliminados “decenas de terroristas”, según un comunicado militar. Ese barrio también ha sido bombardeado de forma repetida y, todo indica, que las tropas extenderán ahora su ofensiva a otras áreas de la urbe.

A principios del pasado noviembre, las fuerzas israelíes rodearon la Ciudad de Gaza y lanzaron su primera gran incursión terrestre, y consideraron que habían logrado desmantelar la infraestructura de Hamás para que no supusiera una amenaza. Sin embargo, ocho meses después, el Ejército vuelve a asegurar que Hamás dispone de túneles, bases de operaciones, almacenes de armamento, hombres, etc.

Mientras Israel pide a los civiles palestinos que se desplacen a las zonas designadas como “seguras”, sigue bombardeando esas áreas y matando a los desplazados. El martes murieron al menos 27 personas y medio centenar resultaron heridas en un ataque contra una escuela donde se refugiaban en Jan Yunis, en el sur de Gaza.

La Media Luna Roja Palestina confirmó que decenas de personas se vieron afectadas tras un ataque a una escuela en la zona de Absan. La oficina de Comunicación del Gobierno (controlado por Hamás) aseguró en un comunicado que la mayoría de las víctimas son mujeres y niños, y destacó que esta “masacre” se produjo después de otros ataques contra campamentos ubicados en la zona central de la Franja, donde perecieron un total de 60 personas.

El Ministerio de Sanidad gazatí ha dicho este miércoles que las víctimas mortales del ataque contra la escuela Al Awda, han subido a 27, además de 53 heridos, entre ellos algunos “graves”.

Por su parte, el Ejército ha confirmado este miércoles que el ataque fue llevado a cabo con “munición precisa” y su objetivo era “un terrorista del ala militar de Hamás”. En un comunicado, ha señalado que “están investigando las informaciones de que civiles resultaron heridos junto a la escuela Al Awda”.

En Jan Yunis se encuentran muchos de los desplazados tras la invasión terrestre de Rafah, la ciudad más al sur de la Franja, donde las tropas israelíes entraron a comienzos de mayo y donde llevan operando desde entonces. Anteriormente, habían llevado a cabo una operación terrestre en Jan Yunis durante varios meses este año, forzando el desplazamiento de los residentes a Rafah, en primer lugar.

Desde el comienzo de la guerra el pasado 7 de octubre, más de 38.000 gazatíes han muerto y miles están desaparecidos bajo los escombros. A ellos se suman casi dos millones de desplazados internos que sobreviven en medio de la devastación, la hambruna, la escasez de agua, medicinas y combustible.