El Parlamento Europeo ha reclamado un alto el fuego en Gaza, pero condicionado a la liberación “de forma inmediata e incondicional” de los rehenes y a que “se desmantele la organización terrorista Hamás”. Es la coletilla que ha introducido el Partido Popular Europeo para votar a favor de una resolución en la Eurocámara. El apoyo de la extrema derecha, un puñado de eurodiputados liberales, socialistas y tres verdes (alemanes, rumanos, daneses, fundamentalmente) a esa enmienda ha provocado que el texto final, que ha salido adelante con 312 a favor, 131 en contra y 72 abstenciones, quede descafeinado.
La resolución conjunta, impulsada por socialistas, liberales y verdes, reclamaba un “alto el fuego permanente y que se reanuden los esfuerzos en pro de una solución política” que pase por el reconocimiento de los dos estados de acuerdo a las fronteras delimitadas en 1967 y, por tanto, el fin de la ocupación. Era un paso importante después de que en el mes de octubre la Eurocámara rechazara la propuesta de La Izquierda de pedir un alto el fuego. Pero tres meses después de que comenzara la guerra en Gaza tras los atentados de Hamás contra Israel, con más de 20.000 muertos, la mitad de ellos niños palestinos, y más de 60.000 heridos, la mayoría parlamentaria ha dado un paso más.
No obstante, para el PP era insuficiente la exigencia de “la liberación inmediata e incondicional de todos los rehenes y el desmantelamiento de la organización terrorista Hamás” y ha pesentado una enmienda para condicionar el alto el fuego a que eso suceda. “Reclama un alto el fuego permanente y la reanudación de los esfuerzos por una solución política, siempre que todos los rehenes sean liberados de forma inmediata e incondicional y se desmantele la organización terrorista Hamás; reitera su apoyo inquebrantable a una solución de dos Estados negociada y basada en las fronteras de 1967, con dos Estados soberanos y democráticos que convivan en paz y con la seguridad garantizada, con Jerusalén como capital de ambos Estados y respetando plenamente el Derecho internacional”, señala el texto finalmente aprobado por el Parlamento Europeo.
“Mientras hablamos, siguen cayendo las bombas, siguen muriendo personas. La guerra ahí sigue”, alertó el vicepresidente de los socialistas, Pedro Marques, que recordó que la población asesinada en Gaza equivaldría a cinco millones de personas si se extrapolara a Europa. ¿Cómo puede considerarse esto una respuesta proporcionada respecto a lo que ha hecho Hamás? Hacemos un llamamiento para acabar con Hamás, pero eliminar a Hamás no se puede hacer caiga quien caiga. Los niños no son terroristas y el castigo colectivo no es de recibo“. El español Javi López agregó que en este conflicto ”no solo está en juego la estabilidad en Gaza sino también la credibilidad de la UE como actor global“.
También los liberales expresaron que “hay límites” en las guerras ante el horror de más de 20.000 personas muertas y dos millones de desplazados, según recordó la eurodiputada Hilde Vautmans. La cifra de muertos representa el 1% de la población de Gaza, recordó Jordi Solé, en representación de Los Verdes/EFA: “Esta carnicería tiene que parar. la justicia internacional tiene que intervenir”.
La resolución se quedaba corta para la izquierda (The Left/GUE), que reclama, además del alto el fuego que lleva defendiendo desde el principio, el embargo de armas a Israel y que los estados de la UE se sumen a la demanda de Sudáfrica ante la Corte Internacional de Justicia. “Es increíble escuchar a representantes del Consejo y la Comisión hablar a estas alturas de una operación militar contra Hamás. Es increíble escuchar que Israel está ejerciendo su derecho a defenderse. ¿De quién?”, preguntó Manu Pineda (IU).
A pesar de describir la situación “como trágica” y de reclamar contención en su destrucción de Gaza “que hace imposible vivir” así como la liberalización de los rehenes por parte de Hamás, el comisario de Gestión de Crisis, Janez LenarÄiÄ, se limitó a pedir una “pausa humanitaria ahora mismo”, que es la dialéctica pactada por los líderes de los 27.
Inmediatamente intervino el portavoz del PP, Antonio López-Isturiz, que afeó al comisario que dedicara más tiempo a criticar a Israel. “No estaría mal que dedicara un minuto a hablar de Hamás, Hezbolá… (...) Esa debería ser la perspectiva de la UE”. El presidente de la delegación de la Eurocámara para las relaciones con Israel apuntó a Irán como potencia que “mueve los hilos” y defendió los términos de la resolución aprobada en octubre, que no reclamaba el alto el fuego.
Los representantes de la extrema derecha también aprovecharon para lanzar el argumentario pro-israelí. “Establecer un alto el fuego es sencillo. Hamás tiene que liberar a todos los rehenes. Yo estoy a favor de la democracia y de Israel, ¿y ustedes?”, interrogó el sueco Charlie Weimers. “Quieren hablar de la población de Gaza (...), uno de cada dos votaría a Hamás”, expresó la eurodiputada de Alternativa por Alemania, que lanzó un discurso xenófobo y dijo que Hamás extiende “su red de terror en Europa”: “Estaria bien que ustedes analizaran la situacion humanitaria de los 136 rehenes que están en manos de los carniceros islamistas. Sólo les interesa la situación humanitaria de los enemigos de Israel”.