Comienzan las deliberaciones en el juicio que definirá si el español Pablo Ibar es condenado a muerte
Un jurado, conformado por 12 personas −ocho mujeres y cuatro hombres−, comenzará este jueves las deliberaciones para resolver si hallan o no culpable al hispano-estadounidense Pablo Ibar por un triple asesinato cometido en 1994 en Miramar (Florida).
El nuevo juicio del español, condenado a muerte en Estados Unidos en 2000, ha terminado este miércoles en el tribunal de Broward County de Florida con los alegatos del fiscal y los abogados defensores. A partir de ahora comienzan las deliberaciones de los 12 miembros del jurado, ha informado la Asociación contra la Pena de Muerte Pablo Ibar.
16 años en el corredor de la muerte
Ibar, de 46 años, fue condenado a muerte acusado de un triple asesinato en 1994, crimen del que él siempre se ha declarado inocente. Aunque el primer juicio fue declarado nulo porque los miembros del jurado no se pusieron de acuerdo, en el año 2000 fue declarado culpable y condenado a muerte.
De los 24 años que lleva preso, Ibar ha pasado 16 en el corredor de la muerte. Hasta que en 2016 el Tribunal Supremo de Florida anuló la condena y ordenó repetir el juicio por considerar que había tenido una defensa ineficaz y había sido condenado a partir de pruebas débiles y escasas.
La Fiscalía vuelve a pedir la pena de muerte
En este cuarto juicio, la Fiscalía ha insistido en pedir la pena de muerte para acusado. El alegato final corrió a cargo del fiscal Chuck Morton −ahora fiscal auxiliar y fiscal en el juicio en que Ibar fue condenado a muerte en 2000−, que no presentó pruebas nuevas, sino que se limitó a subrayar la brutalidad del crimen que se aprecia en el vídeo de prueba, a misma grabación que la defensa cuestiona.
Según la Asociación que le representa, el fiscal se mostró nervioso, pidió al jurado que no se dejase impresionar por peritos “con acentos extranjeros” y concluyó con la frase: “Don't let him get away with murder”, una expresión que puede traducirse como 'no permitan que se salga con la suya' o 'cometer asesinato impunemente' y que, además, remite al título de una popular serie de televisión.
La defensa protestó, por considerar que esta expresión es lesiva del derecho del acusado a la presunción de inocencia y motivo para una posible anulación del juicio.
La defensa cuestiona las pruebas: “Es inocente”
Por su parte, los abogados defensores, Benjamin Waxman y Joe Nascimiento, subrayaron que hubo testigos de la Fiscalía que faltaron a la verdad y que sus peritos han puesto en duda los métodos de identificación que se usaron en el primer juicio, arguyendo, además, que la mala calidad del vídeo impide incriminar a nadie y que el rostro que podía extraerse de él tenía diferencias con el de Ibar.
También señalaron que ninguna de las huellas dactilares recogidas en el lugar del crimen se corresponde con las de Ibar, ni tampoco los cabellos ni el ADN más abundante en la camiseta hallada en el lugar y que durante el juicio ha habido indicios de contaminación de las pruebas.
Los abogados defensores insisten en que las evidencias conducen “a una sola conclusión: Pablo Ibar es inocente”.
La deliberación podría durar días
Está previsto que los jurados continúen deliberando en los próximos días, previsiblemente entre las 9.00 y las 20.00 horas (las 15.00 y las 2.00, hora peninsular española).
No hay un plazo legal para que el jurado alcance un veredicto, que tiene que ser unánime. Sin embargo, el juez ha fijado un plazo de tres días al cabo del cual le preguntará al jurado si necesita más tiempo y, de ser así, se lo otorgará.
Por orden del juez, los miembros del jurado han acudido a la sesión con maletas con sus efectos personales y mudas para tres días y ha tenido que entregar sus móviles y sus ordenadores. Durante las deliberaciones, se alojarán en un hotel en habitaciones sin televisión. Solo podrán comunicarse entre ellos y únicamente cuando estén todos juntos.
Si el juez estima que el jurado tarda más de lo debido, se reunirá con él para ver si es posible que alcancen la unanimidad y, en caso contrario, lo disolverá y declarará nulo el juicio, lo que obligaría a repetirlo.