La policía norirlandesa investiga el asesinato a tiros de la periodista Lyra McKee durante los disturbios ocurridos en la noche del jueves en Derry, en un acto considerado “terrorismo”, cuya autoría atribuye presuntamente a disidentes republicanos.
La reportera, de 29 años y natural de Belfast, resultó gravemente herida en la cabeza sobre las 23.00 GMT del jueves, después de que un pistolero enmascarado abriera fuego de forma indiscriminada contra efectivos policiales en el área de Creggan, una zona residencial llena de niños y adolescentes. Al percibir la gravedad de lo ocurrido, los agentes trasladaron a McKee en un vehículo policial hasta el hospital de Altnagelvin, sin que se pudiera hacer nada por salvarle la vida.
En una rueda de prensa, Mark Hamilton, inspector jefe adjunto del servicio policial de Irlanda del Norte (PSNI), ha apuntado como “probable” autor de los disturbios al llamado Nuevo IRA, al que culpó de perpetrar un acto “premeditado” y “horrendo”.
“Creemos que esto es un acto terrorista, que ha sido perpetrado por disidentes republicanos violentos. Nuestra valoración en este momento es que es probable que el Nuevo IRA esté detrás y esto constituye nuestra primera línea de investigación”, ha explicado. La víctima no estaba trabajando como periodista cuando recibió las balas, según los medios locales, y se había mudado a Derry hacía poco tiempo para vivir con su pareja.
Independencia de la República de Irlanda
Los disturbios se desataron en respuesta a una operación previa que llevaba a cabo la policía, con redadas en varias propiedades de la zona en busca de armas de fuego a fin de evitar posibles ataques de disidentes republicanos durante este fin de semana de conmemoración de la independencia de la República de Irlanda.
Los agentes contabilizaron más de 50 lanzamientos de cócteles molotov contra coches de la policía y señalaron que se quemaron dos vehículos del cuerpo en la ola de violencia. “Sacar un arma de fuego y disparar en la calle en una zona residencial donde saben que hay muchísimas personas es un acto calculado y despiadado, solamente diseñado para herir y matar”, subrayó Hamilton a la prensa.
El Nuevo IRA, conformado por varios grupos armados opuestos al proceso de paz, se atribuyó recientemente la responsabilidad de los envíos a Londres y Glasgow de varios paquetes bomba. La amenaza que representa para la policía en Irlanda del Norte es elevada. Ese grupo fue responsable también de la explosión de un coche bomba a las afueras de un tribunal de Derry el pasado enero. La llamada “salvaguarda” irlandesa, contenida en el acuerdo del Brexit, consensuado entre Londres y Bruselas, ha generado malestar entre esos grupos disidentes en los últimos meses.