Portugal quiere bajar el IVA de los espectáculos... menos el de los toros
El Gobierno portugués, encabezado por el socialista António Costa desde 2015 con el apoyo del Bloco de Esquerda y el Partido Comunista, quiere que el IVA de las corridas de toros sea superior al del resto del IVA cultural. Su proyecto de Presupuestos para el próximo año −los últimos de Costa en esta legislatura− recoge que este impuesto se mantenga en el 13%, mientras rebaja al 6% (el reducido) el de la danza o el teatro, por ejemplo. Hasta ahora, además, los profesionales de la tauromaquia estaban exentos del pago de este tributo.
La intención del Gobierno socialista es que esta reducción de la carga fiscal prevista para el próximo año afecte a espectáculos “de canto, danza, música, teatro y circo” que tengan lugar en vivo en “recintos cerrados o en circos ambulantes”, mientras los realizados en espacios abiertos se mantendrán en el 13%, la tasa intermedia. “Por primera vez en esta legislatura el Gobierno ha acogido medidas del PAN en la propuesta de los Presupuestos”, explica a eldiario.es el único diputado del partido Personas, Animales y Naturaleza (Pessoas-Animais-Natureza, PAN) en la Asamblea, André Silva. “El hecho de que los toreros dejen de estar exentos del pago de la tasa de IVA en sus servicios es una medida de justicia ética y tributaria: no es éticamente aceptable que sean, por ejemplo, equiparados a médicos y enfermeros, profesionales fundamentales en nuestra sociedad”, añade.
La polémica colea desde hace semanas y la oposición de derechas se ha revuelto contra la nueva ministra de Cultura, Graça Fonseca. El argumento que más se ha repetido ha sido la acusación de imponer una “dictadura” basada en sus gustos. Una de las frases de la discordia la pronunció en la Asamblea de la República, cuando le pedían la retirada de este gravamen: “[El IVA a] la tauromaquia no es una cuestión de gusto. Es una cuestión de civilización y lo mantendremos como está”. Toda la bancada de derechas se lanzó contra la ministra, que estrenó la cartera hace un mes tras la remodelación del Ejecutivo, al entender que les acusaba de incivilizados.
La medida ha partido al grupo parlamentario socialista: el líder de la formación en la Asamblea ha amenazado este viernes con proponer una modificación a los Presupuestos para que el toreo esté recogido en la reducción del IVA cultural y ha defendido la libertad de voto, ante lo que Costa ha dicho estar “muy sorprendido” y, si finalmente ocurre, “necesariamente desautorizado”.
El debate ha incluido un intercambio de cartas abiertas a través de la prensa entre Manuel Alegre, histórico socialista y poeta portugués, y António Costa. En la última, publicada este domingo, defiende a su ministra y argumenta que su afirmación no supone descalificar al oponente político. El primer ministro dice que le resulta chocante la emisión de corridas −en las que no se mata al toro en la plaza, pero no evitan la muerte del animal− en la televisión pública, pero no prohibiría su retransmisión. Para Costa, debe concederse a cada municipio la libertad de permitir la realización de corridas frente a su prohibición legal y no contempla la celebración de un referéndum. Pese a ello, asegura que rechaza la tauromaquia como una “manifestación pública de una cultura de la violencia o de disfrute del sometimiento animal”.
Las cuentas lusas se aprobaron en primera votación por el partido del Gobierno con el apoyo de sus socios de izquierdas: Bloco de Esquerda, Partido Comunista, Los Verdes y el diputado único de PAN. El texto está en discusión en las comisiones hasta que se elabore su versión definitiva y sea sometido a una votación final el 29 de noviembre.
En julio se tumbó la abolición de las corridas
Todavía está reciente el rechazo de la Asamblea de la República a la prohibición de las corridas de toros. Fue este julio por mayoría absoluta al reunir solo el voto a favor del Bloco de Esquerda, el escaño de PAN, ocho diputados de PS y uno de los socialdemócratas (PSD). André Silva valora que, mientras no exista la “valentía política” para abolir “esta práctica anacrónica y violenta”, al menos deben pagar impuestos “como todos los trabajadores” y no ser financiados con dinero público.
Mientras, la Federación Portuguesa de Tauromaquia (PróToiro) ha pedido la dimisión de la ministra de Cultura en un comunicado en el que su secretario general, Hélder Milheiro, afirma que Fonseca “no entiende el papel de un ministro en un país democrático”, donde el Estado “no puede imponer discriminaciones de base ideológica”. El diputado André Silva rechaza estas peticiones por ser “infundadas”: “Ya era hora de tener en el Gobierno a una figura clave capaz de asumir ante la sociedad que hay algo equivocado en la forma en la que la industria taurina ha sido privilegiada por el poder establecido en Portugal”.
Los toros en España: el IVA más bajo de su historia
Hasta hace unos meses, el IVA de las corridas de toros en España era inferior al que se imponía al cine. En 2017, el Gobierno de Mariano Rajoy bajó el IVA cultural del 21 al 10% -tras la subida de 2012- para los espectáculos en vivo, lo que incluyó las corridas de toros, la danza, el teatro y los conciertos. El cine continuó bajo la misma carga fiscal hasta julio de 2018, con la aprobación de los Presupuestos en el Congreso.
Las corridas de toros tienen ahora el IVA más bajo en toda su historia, a pesar de que las cifras de asistencia no acompañan. En la última década, los festejos taurinos que acaban con la muerte de los animales lidiados han descendido un 57,5%. Según los datos que aporta el Ministerio de Cultura, en 2017 se celebraron 1.553 festejos (supone una disminución del 2,8% respecto a 2016). De ellos, 387 fueron corridas de toros y 220 novilladas con picadores.
