Crece la lucha interna en el Partido Conservador tras la petición pública de apartar a Cameron
Las esperanzas de David Cameron de ser capaz de evitar la fractura definitiva del Partido Conservador después de la campaña sobre el referéndum para permanecer o no en la Unión Europea se hundieron este domingo cuando dos parlamentarios conservadores rebeldes hicieron un llamamiento público para buscar un nuevo líder y unas elecciones antes de Navidades.
Los protagonistas de estos ataques son Andrew Bridgen y Nadine Dorries –ambos favorables al Brexit y, desde hace mucho tiempo, férreos oponentes públicos del primer ministro. Aseguran que, incluso ganando el referéndum sobre la Unión Europea, no dejarán de plantar cara al liderazgo de Cameron. El desafío de cambiar de líder conservador en verano ha sido rechazado por otros compañeros conservadores.
Pero estos comentarios coincidían con los de los ministros a cargo de la campaña del Brexit, que lanzaron algunos de los peores ataques personales sobre Cameron, provocando que el laborista Alan Johnson dijera que las luchas internas de los tories se estaban convirtiendo “en algo verdaderamente desagradable”.
Bridgen contó en el programa de la BBC 5 Live que Cameron había estado haciendo “escandalosas” afirmaciones en sus declaraciones para persuadir a los votantes para permanecer en la UE y que, a consecuencia de esto, había perdido de facto su mayoría parlamentaria.
“El partido está bastante fracturado, partido por la mitad y no sé quién podría volver a unirnos para mirar hacia un gobierno efectivo. Honestamente creo que probablemente necesitamos ir a unas elecciones generales antes de Navidad y conseguir un nuevo mandato desde la gente”, comentó. Bridgen aseguró que al menos 50 parlamentarios conservadores –el número necesario para presentar una cuestión de confianza– sienten lo mismo sobre Cameron y que una votación sobre el futuro del primer ministro era “muy probable” después del referéndum.
Dorries dijo este domingo en el programa de Robert Peston que ya había presentado su carta al presidente del comité conservador expresando la falta de confianza en el primer ministro. “Ha mentido significativamente, y creo que es por eso por lo que realmente el corazón de los conservadores está tan dañado. Decir que Turquía no entrará en la Unión Europea en 30 años es mentir”.
El Brexit marcará el futuro de Cameron
Una disputa por el liderazgo solo tendría lugar si Cameron pierde una moción de confianza, la cual parece improbable si la campaña a favor de permanecer en la UE gana el referéndum. Pero un considerable voto contrario a Cameron en una moción de confianza podría ser fatal para su mandato, forzándole a acelerar sus planes de salida.
Dorries apuntó que si permanecer en la UE gana con un 60% contra un 40%, Cameron probablemente podría sobrevivir políticamente. “Si la opción de permanecer en la UE gana por una estrecha mayoría, o si la de salir gana, estará acabado en cuestión de días”.
Incluso si, como muchos tories esperan, la moción de confianza no se materializa, los comentarios de Bridgen y Dorries son un recordatorio de cómo los disidentes, la línea dura de los euroescépticos, fueron capaces de causar estragos en el gobierno de John Major en los 90 cuando tenía una pequeña mayoría similar a la de Cameron, que cuenta con una de solo 16.
El parlamentario conservador Steve Baker afirma que Bridgen “tiene parte de razón” sobre la postura contraria que algunos miembros del parlamento tienen hacia la permanencia en la Unión Europea que mantiene Cameron. Baker aseguró que solo unos 30 estaban completamente convencidos con la opción de permanecer. Según explica, cree que esto podría suponer “un problema” para el primer ministro después del 23 de junio.
Pero otras importantes figuras conservadoras a favor del Brexit respaldan a Cameron e insisten en que una moción de confianza no se produciría porque los rebeldes no cuentan con el apoyo suficiente.
“No creo que haya 50 compañeros atacando al primer ministro”, asegura el líder de la Cámara de los Comunes Chris Grayling. “Puedo asegurarte que aquellas personas que lucharon por ganar su escaño hace doce meses no están arremetiendo ahora para conseguir unas elecciones generales en Navidades”.
Graham Brady, el líder del comité conservador, cree que la intervención de Bridgen fue “desafortunada” y que el partido tenía que tirar unido después del referéndum. Liam Fox, antiguo ministro de Defensa, cree que el partido necesita “un período de estabilidad” después del referéndum y que lo mejor sería que Cameron permaneciese como primer ministro. Iain Duncan Smith, exministro de Trabajo y Pensiones, dice también que no está a favor de reemplazar a Cameron.
En un ataque personal que parecía dirigido claramente a Cameron y al ministro de Economía, George Osborne, Priti Patel, la ministra de Empleo, aprovechó un artículo en el Sunday Telegraph para decir que era “bochornoso” que los ricos defensores de permanecer en la UE no se den cuenta de cuánto daño está haciendo la inmigración masiva a los pobres.
“Si tienes una fortuna o si trabajas en Goldman Sachs, estarás bien. Pero cuando los servicios públicos estén bajo presión, aquellas personas que no tienen el lujo de poder permitirse alternativas serán los más vulnerables”, ha escrito. “Es vergonzoso que aquellos que lideran la campaña contra el Brexit fallen a la hora de atender a aquellos que no tienen sus ventajas”.
El artículo de Patel coincidió con Boris Johnson, el antiguo alcalde de Londres, y con Michael Gobe, el ministro de Justicia. Ambos escribieron una carta abierta a Cameron para pedirle que reconociese que le sería imposible cumplir la promesa de mantener una migración neta por debajo de 100.000 personas si Reino Unido permanece en la UE. La carta, también firmada por la laborista Gisela Stuart, dice que no cumplir esta promesa “es dañino para la confianza pública”.
Traducido por Cristina Armunia Berges