La UE no concederá al Reino Unido un acuerdo de libre comercio en los próximos dos años, y el acuerdo de transición para suavizar la salida de la Unión Europea después de 2019 no puede durar más de tres años, según un borrador de resolución del Parlamento Europeo. Es la primera respuesta oficial a cargo de una institución de la UE a la puesta en marcha del artículo 50 por parte de Theresa May.
Una copia de la resolución, en la cual estuvo muy involucrado Michel Barnier, jefe del equipo de la UE a cargo de las negociaciones del Brexit, se ha filtrado y the Guardian ha tenido acceso a ella. El documento deja en evidencia el difícil camino que deberá recorrer el Reino Unido al comenzar el histórico proceso de retirarse del bloque comercial.
En las 11 páginas de cláusulas, se advierte a la primera ministra May que la UE protegerá fervientemente sus intereses políticos, económicos y sociales, y que la posición del Reino Unido, incluso durante el período de transición, no será tan favorable como lo es actualmente.
El acuerdo de retirada, que cubre las responsabilidades económicas, los derechos de los ciudadanos y la cuestión de la frontera de Irlanda, tendrá que ser aceptado por una mayoría cualificada del 72% de los 27 países miembros de la UE que quedan, lo cual representa un 65% de la población. El acuerdo luego tendría que ser aprobado por mayoría simple por el Parlamento Europeo.
Barnier ha dicho que cualquier acuerdo de libre comercio que se negocie después de que el Reino Unido se retire de la UE sería un “acuerdo mixto” que necesitaría la ratificación de los parlamentos nacionales de los 27 estados además de la aprobación del Parlamento Europeo.
Sir Tim Barrow, representante permanente del Reino Unido en la UE, entregó el miércoles una carta al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, para notificar a la UE la intención del Reino Unido de retirarse, mientras May se presentaba ante la Cámara de los Comunes para hablar ante los diputados.
“No hay necesidad de pretender que este es un día feliz, ni en Bruselas ni en Londres. No después de que la mayoría de los europeos, incluyendo casi la mitad de los votantes británicos, deseara que permaneciéramos unidos”, aseguró Tusk en una rueda de prensa, media hora más tarde.
Tusk aseguró que el Brexit unirá a los 27 estados miembros restantes, y que el Consejo y la Comisión Europea tienen el firme mandato de proteger los intereses de la UE. Pero agregó: “En cuanto a mí, no voy a fingir que estoy feliz”.
El borrador de resolución del Parlamento Europeo, que se supone que refleja el pensamiento de la Comisión Europea y del Consejo Europeo, cuyos miembros representan a los 27 estados de la UE que quedan, dice que el Brexit será un “lamentable suceso sin precedentes, ya que nunca antes un Estado Miembro ha abandonado la Unión Europea”, pero que “esta retirada debe ser acordada de forma ordenada para no afectar negativamente a la Unión Europea, ni a sus ciudadanos, ni al proceso de integración europeo”.
Los principios generales de la Cámara para las futuras negociaciones son:
- Un futuro acuerdo entre la Unión Europea y el Reino Unido “sólo puede concluirse una vez que el Reino Unido se haya retirado de la UE”.
- Podría haber un acuerdo de transición después de 2019 para que los controles aduaneros y las fronteras no se pongan en práctica desde el día uno del Brexit, pero estos acuerdos no pueden exceder los tres años de duración y estarán “limitados en su alcance, ya que nunca pueden sustituir la pertenencia a la UE”.
- El Tribunal de Justicia Europeo estará a cargo de resolver cualquier cuestión legal durante el período de transición.
- El Reino Unido podrá revocar su notificación del artículo 50, pero ésta debería estar “sujeta a condiciones impuestas por toda la UE27 para que no pueda utilizarse como una herramienta procedimental, en un intento de mejorar los términos de la pertenencia del Reino Unido al bloque”.
- Si Reino Unido intentara negociar algún acuerdo de libre comercio con cualquier otro país mientras todavía es miembro de la UE, no habrá ninguna posibilidad de acuerdo comercial con la Unión.
- No habrá ningún acuerdo especial “que otorgue a las empresas con sede en el Reino Unido acceso preferencial al mercado único y/o a la unión aduanera”.
- La fecha límite para que los ciudadanos de la UE pierdan el derecho automático a la residencia en Reino Unido no puede ser antes del 29 de marzo de 2019, cuando el país abandone la UE, o el gobierno británico estaría violando la ley europea.
- Reino Unido quedará a cargo de todos los pagos “que surjan de compromisos pendientes, así como de hacer una provisión de fondos para cuestiones no contabilizadas, pasivos contingentes y otros costos económicos que surjan como resultado directo de la retirada”.
- El resultado de las negociaciones sobre la relación futura entre el Reino Unido y la Unión Europea “no puede involucrar ningún compromiso entre seguridad interna y externa, incluyendo cooperación de defensa por un lado y la relación económica futura por el otro”.
Draft Resolution by The Guardian on Scribd
La resolución no sería vinculante, pero el Parlamento Europeo tendrá derecho a vetar cualquier acuerdo en 2019, y ha estado trabajando con la Comisión Europea para establecer los parámetros aceptables para las negociaciones en esta primera intervención.
La resolución, que se votará el próximo miércoles en Estrasburgo, pide a los 27 estados miembros que quedan en la UE que “actúen unidos, en defensa de los intereses de la Unión Europea y de su integridad”.
Sugiere que un posible modelo para el futuro podría ser algún tipo de estatus de miembro asociado, como la que actualmente tiene Ucrania.
El acuerdo con Ucrania le otorga significativo acceso al mercado europeo, pero no debe atenerse a las leyes ni al Tribunal de Justicia de la UE. Este estatus no contempla la libre circulación y permite a Ucrania negociar sus propios acuerdos de libre comercio.
Sin embargo, este modelo sí requeriría un “importante aporte” al presupuesto de la UE, potencialmente casi la mitad de lo que aporta actualmente, según un reciente estudio del Centro de Estudios de Políticas Europeas.
El acuerdo de asociación con Ucrania también permite la colaboración en políticas de defensa y asuntos exteriores, y en la lucha contra el crimen y el narcotráfico. Además de los pagos en efectivo, la UE obtiene el acceso sin restricciones al mercado ucraniano.
Sin embargo, la resolución del Parlamento Europeo dice que sin un acuerdo de retirada relativo a los derechos de los ciudadanos, las cuestiones económicas y la frontera de Irlanda, Reino Unido “abandonaría automáticamente la Unión el 30 de marzo de 2019 de forma desordenada”.
Agrega que cualquier acuerdo futuro entre la UE y el Reino Unido depende de que el gobierno de May siga cumpliendo “las normas que provee la legislación y las políticas de la Unión, en materia de medio ambiente, cambio climático, lucha contra la evasión fiscal, competencia, políticas comerciales y sociales, entre otros”.
La resolución del Parlamento también hace un guiño favorable a los deseos de Guy Verhofstadt, hombre clave para el Brexit, de que los ciudadanos del Reino Unido puedan solicitar individualmente mantener sus derechos dentro de la UE, aunque esa cuestión todavía es difusa.
“Muchos ciudadanos del Reino Unido han expresado su fuerte oposición a la posibilidad de perder los derechos que hoy disfrutan”, dice. Los diputados europeos “proponen que la UE27 estudie cómo atenuar esto, dentro del marco de las leyes de la UE y respetando los principios de reciprocidad, equidad, simetría y no discriminación”.
El Parlamento afirma que espera que la resolución sea tenida en cuenta por el Consejo Europeo y por la Comisión Europea durante las negociaciones futuras.
Traducción de Lucía Balducci