¿Qué alega la Casa Blanca?
La Casa Blanca afirma que el Ejército está preparando un ataque con armas químicas que “resultaría en la muerte masiva de civiles, incluidos menores”.
¿Cómo ha utilizado antes el régimen las armas químicas?
Las ha desplegado de diversas formas en los últimos cinco años: en granadas y bombas improvisadas lanzadas desde helicópteros, misiles disparados desde aviones de combate y ráfagas de artillería y misiles a medida lanzados desde tierra firme.
A menudo se ha utilizado el cloro, pero como tiene una finalidad industrial en Siria, no está prohibido. El cloruro de hidrógeno es un arma rudimentaria que puede ser mortal cuando está altamente concentrado. En dosis bajas, puede dañar pulmones o provocar graves problemas respiratorios y otros síntomas, incluidos vómitos y náuseas.
El agente nervioso y letal gas sarín ha sido utilizado en menos ocasiones, pero genera más indignación internacional porque puede provocar la muerte de forma masiva e indiscriminada.
Su uso más reciente fue en un ataque en la localidad de Jan Shijún, al norte de Siria, el 4 de abril. Otros ataques anteriores se realizaron en poblaciones cercanas a Alepo, Homs, Idlib y en las afueras de Damasco. Un ataque a gran escala con más de una tonelada de sarín mató a más de 1.300 personas en los suburbios de la capital siria en agosto de 2013. La inmensa mayoría de los muertos se produjo en zonas controladas por los insurgentes.
¿Qué sabemos de sus reservas de armas químicas?
El régimen sirio entregó la mayoría de sus reservas de gas sarín seis meses después del ataque de Damasco de 2013. El proceso fue negociado por Rusia como una forma de evitar bombardeos aéreos en represalia contra el régimen, algo con lo que amenazó EEUU. Equipos organizados por la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPAQ) sacaron las armas. La organización había identificado 1.300 toneladas de gas sarín y químicos utilizados para su producción. Aunque se retiró gran parte de las reservas, los servicios de inteligencia creen que hasta cinco toneladas no se declararon.
¿Cómo se han confirmado los ataques anteriores?
En los ataques de Damasco y Jan Shijún se utilizaron muestras biológicas para confirmar el uso de gas sarín. Laboratorios de la OPAQ e instalaciones gubernamentales en Reino Unido, Estados Unidos y Francia llevaron a cabo los exámenes. Tras los ataques, servicios de inteligencia rastrearon comunicaciones interceptadas que no fueron analizadas en tiempo real y que dieron indicios de que unidades del Ejército sirio se habían preparado con antelación.
En el ataque a Jan Shijún, las preparaciones incluían el movimiento de fuerzas vinculadas de cerca al uso de armas químicas a la base aérea desde la cual despegó el avión que supuestamente lanzó el gas sarín.
Esas fuerzas incluían al Centro Sirio de Estudios Científicos e Investigación, la Guardia Republicana y la 4ª División, dirigida por el hermano de Bashar al Asad, Maher. Los servicios de inteligencia también se dieron cuenta de un uso inusual días antes de unidades de aire acondicionado y purificación del aire en la misma base. Estas se utilizan a menudo en la preparación y el almacenaje del gas sarín cuando este se mezcla y se convierte en arma, y normalmente también antes de su utilización.
Traducido por Javier Biosca Azcoiti