Far Cry 4, o cómo mantener la calidad de una saga

Hay una serie de títulos indispensables para los amantes de los videojuegos de acción. La mayoría pertenecen a sagas consagradas que han evolucionado y se han ganado su reputación durante años. Este grupo de videojuegos, la élite del género de acción, no suelen permitir la entrada a las nuevas IPS, poniendo muchas piedras en su camino al tener el listón muy alto. Sin embargo, algunos juegos logran superar esas barreras y ponerse a su altura.

Far Cry es una de las sagas que surgió de la nada para competir con las grandes del género. El primer título de esta franquicia de Ubisoft salió a la venta en 2004, presentándonos un nuevo tipo de juego de acción que despuntó y encantó a los fans. Durante estos últimos diez años Far Cry no ha hecho más que afianzar su éxito con títulos de gran éxito, auténticas locuras para los sentidos, por lo que la llegada de Far Cry 4 hacía preguntarse a los fans si lograrían mantener la calidad.

Hace escasos días que la cuarta entrega ha llegado para PC y consolas de vieja y nueva generación, y las dudas de esos fans han sido resueltas con rotundidad. ¿Quieres saber qué esperar de este juego? ¡Pues ya puedes empezar con nuestro análisis!

En medio de un conflicto bélico y muchos locos. Esto me suena...

En medio de un conflicto bélico y muchos locos. Esto me suena...La trama de Far Cry 4 sigue la estela de sus anteriores entregas. Nos perdemos en un entorno natural, salvaje a la vez que impresionante, donde debemos sobrevivir a la violencia reinante. Si otras veces visitamos África o las profundidades de la selva, esta vez nos perdemos en Kyrat, una aislada región del Himalaya sumida en la guerra civil.

Esta vez nos metemos en la piel de Ajay Ghale, un joven originario del Himalaya que lleva gran parte de su vida en Estados Unidos. Tras la muerte de su madre, Ajay decide cumplir su último deseo, que devuelva sus cenizas a su tierra natal. A pesar de las señales que le aconsejan que no vaya a Kyrat, Ajay se dirige hacia allí, tan solo para caer en una emboscada y convertirse en prisionero de Pagan Min, un déspota que se ha autoproclamado rey y que compite en locura con otros villanos de la saga.

Tras lograr huir de su captor, Ajay se encuentra con un grupo que se hace llamar Senda Dorada, rebeldes que luchan para apartar a Pagan Min del poder. Pronto descubrirá que esa rebelión fue iniciada por su propia familia, los Ghale, y que su regreso al Himalaya ha aumentado las esperanzas de todos los que luchan por la libertad. Ajay no tardará en comprometerse con la causa y empezar a repartir leña contra los soldados de Pagan Min. Es decir, sangre, tiroteos y explosiones al más puro estilo Far Cry.

Durante la aventura tendremos que tomar algunas decisiones que cambiarán el desarrollo de la trama. Tendremos que elegir si apoyar a Sabal o Amita, dos miembros de la Senda Dorada. En función de estas decisiones se nos asignarán unas misiones u otras, y pasaremos por Kyrat con un mayor o menor impacto.

Como ya he mencionado, la trama no varía mucho respecto a la de los títulos anteriores. Sigue la misma estructura, con un joven idealista que se ve envuelto sin proponérselo en un conflicto que puede cambiarle para siempre. Aparte de las grandes dosis de violencia, Far Cry 4 incluye ese punto místico pero tenebroso que caracteriza a las anteriores entregas. En esta ocasión, Ajay visitará templos y conocerá sacerdotes que lo guiarán por una senda desconocida.

La falta de innovación en la narrativa no tiene por qué ser algo malo, siempre que se mantenga la calidad, y Far Cry 4 lo cumple de sobra. Durante la aventura nos encontramos con auténticos chiflados, como el religioso vendedor de armas Longinus o el mismísimo Pagan Min (una de las primeras escenas, en la que se come las cenizas de la madre de Ajay, es perturbadora). Además, a medida que avanzamos la historia engancha cada vez más, siéndonos cada vez más difícil parar de jugar.

Más de lo mismo, pero con innovaciones

Más de lo mismo, pero con innovacionesSeamos sinceros. Far Cry 4 presenta una estructura y un modo de juego similares a la de los anteriores títulos de la saga. Sigue siendo el mismo shooter cargado de acción y adrenalina, con la misma vista en primera persona y las ventajas y defectos de un juego de este género. Sin embargo, Far Cry 4 ha conseguido superar a sus predecesores y sorprendernos con auténticas novedades, algo que se agradece en las nuevas entregas de una misma saga.

Los juegos de Far Cry siempre han dado mucha importancia a la exploración, pero Far Cry 4 lleva esto a otro nivel, aprovechando las capacidades de las consolas de nueva generación. Tenemos plena libertad de movimientos, pudiendo dirigirnos a donde queramos cuando queramos (siempre con una serie de limitaciones, claro). Esta libertad también se aprecia en las misiones que podemos realizar, decidiendo el orden y la importancia que damos a cada una. Obviamente necesitamos superar algunas misiones de la trama principal para ir avanzando en la aventura, pero eso es algo intrínseco de los videojuegos que no se puede cambiar en títulos de este estilo.

Far Cry 4 presenta una gran libertad a la hora de decidir cómo resolvemos estas misiones, permitiéndonos enfocarlas de forma distinta en función de nuestras habilidades y preferencias. Si somos partidarios del sigilo y la estrategia, siempre encontraremos una forma de infiltrarnos o sabotear. Si por el contrario somos unas máquinas de matar a las que no le preocupa su seguridad, podemos cargar contra un ejército de enemigos sin pensárnoslo dos veces.

Además, el modo de juego siempre es desafiante, ya que no sabes qué vas a encontrarte durante la exploración. Los eventos ocurren al azar, así que en un mismo camino puedes encontrarte un combate entre soldados y campesinos, una manada de animales salvajes o una ruta segura, según sea tu suerte.

Acorde con esto, tenemos la posibilidad de utilizar el entorno a nuestro favor, lo cual es un acierto. Al comenzar la aventura nos enseñan que podemos atraer a animales salvajes y hacer que ataquen a nuestros enemigos con un buen trozo de carnaza fresca. Sin embargo, no es lo único que podemos hacer. Podemos provocar avalanchas que sepulten a algún escuadrón que nos corte el camino, o prender fuego a camionetas y lanzarlas ladera abajo para que arrasen con todo lo que encuentren.

Hay una gran cantidad de misiones en el juego, tanto principales como secundarias. Las primeras, que forman parte de la historia principal del juego, debemos realizarlas de forma individual, pero en las secundarias se nos ofrece la posibilidad de trabajar en cooperativo con otros jugadores. Esta nueva función, una de las que publicitó más Ubisoft, abre un nuevo mundo de posibilidades. Las misiones en cooperativo son divertidas, nos permiten afrontarlas de multitud de forma distintas y divertirnos con amigos, uno de los principales atractivos de los modos multijugador de hoy día.

La libertad que comentaba antes no se limita únicamente a las misiones. Far Cry 4 introduce un puntillo RPG, con la posibilidad de coleccionar y personalizar nuestras propias armas para hacernos con el arsenal que más se adapte a nuestros gustos. Podemos adquirir estas armas comprándolas en tiendas, superando misiones o explorando, y tunearlas a nuestro gusto en algunos puntos y comercios.

Otra de las novedades de esta entrega es la cantidad de vehículos que se han introducido. Si no te valía con conducir camionetas y motos a una velocidad extrema, ahora también puedes sobrevolar la región de Kyrat en avionetas o atravesar las montañas del Himalaya en motos de nieve. Eso por no hablar de la nueva opción que nos permite montar elegantes, destrozando todo en nuestro camino. Como ya ocurriera en otros Far Cry, los vehículos hacen piruetas y sobreviven a caídas y golpes imposibles, así que en este sentido el juego no goza de una gran realismo.

Más multijugador que nunca

Más multijugador que nuncaSi no tenéis suficiente con las misiones secundarias en cooperativo que podemos realizar, Far Cry 4 también ofrece un modo multijugador online propiamente dicho. Se trata de un modo competitivo, en el que formamos grupos con otros jugadores y nos enfrentamos en batallas de cinco contra cinco. Uno de los equipos encarna a los nativos, únicamente con arcos, flechas a su disposición, pero que pueden aprovecharse del terreno y utilizar animales para aplastar a los otros. El otro equipo dispone de todo un arsenal de armas y vehículos a su disposición.

El multijugador tiene tres modos de juego. En el primer debemos luchar contra otros jugadores para conquistar una posición y mantener el control sobre ella el máximo tiempo posible, mientras que en el segundo debemos tomar varios lugares. En el tercer modo de juego debemos conseguir una prenda oculta en el campo del equipo rival, al más puro estilo de “captura la bandera”.

Hay varios mapas en los que jugar, totalmente distintos unos de otros, pero si te cansas de ellos puedes ponerte a diseñar tu propio mapa gracias al editor de niveles que trae el juego. Una novedad que ofrece muchas posibilidades a este modo multijugador que, por otro lado, es bastante común.

Far Cry 4 saca partido a la ambientación en el Himalaya con impresionantes montañas y majestuosos templos.

Far Cry 4 saca partido a la ambientación en el Himalaya con impresionantes montañas y majestuosos templos.Artísticamente Far Cry siempre ha sido una saga espectacular, que nos presenta impresionantes escenarios naturales y ambientaciones que quitan el hipo. Si ya sorprendía con los anteriores títulos, con esta cuarta entrega no hace más que superarse a sí mismo.

La ambientación en el Himalaya les permite presentar toda clase de ubicaciones, desde pequeñas aldeas donde solo viven un puñado de campesinos a portentosos templos ocultos, decorados con grandes estatuas hindúes y budistas. En la zona sur de Kyrat nos encontramos con grandes campos verdes y riachuelos, mientras que en el norte avanzamos por auténticos desiertos de nieve y hielo, que solo son un ejemplo de la enorme variedad de los escenarios y su contraste.

Tanto las personas como los escenarios están detallados con esmero. Podemos ver hasta la última imperfección en la cara de un personaje, o distinguir la textura de los árboles o las rocas tan solo con un vistazo. Las animaciones también son correctas y variadas, sin muchos glitches o bugs que puedan estropear el efecto global.

Como siempre, la música y los efectos sonoros de Far Cry son maravillosos, desde las profundas melodías de inspiración asiática hasta los pequeños ruidos de la naturaleza, pasando por el clamor de las balas durante un tiroteo o el estruendo de las explosiones. El doblaje de las voces también es perfecto, convirtiéndose en una obra de arte en este aspecto.

Conclusiones

ConclusionesUbisoft no ha triunfado con sus lanzamientos para el otoño. Tanto Watch Dogs como Assassin's Creed: Unity no han sido bien recibidos por los fans, debido a la multitud de fallos y su inestabilidad excesiva. Por suerte, Far Cry 4 sí ha cumplido con las expectativas. La nueva entrega de la saga innova respecto a las anteriores sin perder un deje de calidad, convirtiéndose en una de las apuestas más atractivas de final de año.

Aunque la estructura narrativa y el método de juego siguen siendo los mismos, los añadidos como el modo cooperativo o la posibilidad de interactuar con el entorno a nuestro antojo confieren al juego una frescura muy necesaria para aquellos títulos que quieren triunfar a lo largo de varias entregas.

Gráficamente Far Cry 4 es una pasada, con esos escenarios detallados al máximo y con la fauna salvaje que se cruza en nuestro camino. Ubisoft ha sabido aprovechar el apartado gráfico de la nueva generación para ofrecernos un mundo abierto impresionante, y eso no hace más que sumar puntos a un título bastante aceptable ya de por sí.

Para los fans de la saga, Far Cry 4 no hace más que mejorar lo presente, aunque los más exigentes podéis encontrarlo algo repetitivo. Para los amantes de la acción en general, aconsejamos que deis una oportunidad al shooter de Ubisoft y os adentréis en Kyrat. Horas de diversión y acción trepidante garantizadas.

Lo mejor:

  • Far Cry 4 lleva más lejos que nunca la variedad a la hora de resolver misiones.
  • La gran personalización de armas.
  • El modo cooperativo en las misiones secundarias. Ofrecen una nueva forma de juego muy entretenida e interesante.
  • Las nuevas formas de utilizar el entorno en tu beneficio.

Lo peor:

  • Las misiones principales no tienen opción en cooperativo.
  • La narrativa no varía mucho respecto a Far Cry 3.