¡Qué poquito queda para que acabe 2014! Un año que se ha caracterizado por ofrecer grandes juegos con los que disfrutar de nuestras consolas next-gen, aunque ciertamente no se ha librado de culebrones, polémicas y grandes fiascos de esos capaces incluso de acabar con el buen nombre de alguna que otra aclamada saga de videojuegos por las malas decisiones de sus editoras o por la torpeza de ciertos estudios de desarrollo.
Como ya habréis adivinado, vamos a hablar de aquellos juegos que por un motivo u otro nos han herido en lo más profundo de nuestra patatita. Y no precisamente por ser malos juegos, si no por aquello de no cumplir ni por asomo con lo prometido.