Comienza una etapa nueva, aunque reconoce que siempre ha estado vinculado a la Iglesia Católica en La Rioja. Luis Lleyda es el nuevo director de Cáritas La Rioja, una organización marcada por la falta de financiación y que a punto ha estado de aprobar un Expediente de Regulación de Empleo que afectaría a los trabajadores de tres centros ocupacionales en la región. La noticia saltó a los medios de comunicación, llegó a la opinión pública y despertó la 'buena' voluntad' de las instituciones de La Rioja que evitaron el ERE y el cierre.
RIOJA2.COM (R2): Don Luis, coge el relevo de Don Manuel Menchaca, ¿le ha dado algún consejo su antecesor?
LUIS LLEYDA (LLL): En su día él también asumió el mando con toda la responsabilidad y con un cierto miedo. En mi caso, con mucha energía también. Ambos partíamos de la inexperiencia en este campo en Cáritas, aunque hemos sido hombres comprometidos con la Iglesia.
Los dos hemos visto que hay muchas necesidades dentro de nuestra comunidad autónoma ye so es preocupante. Manuel me ha dicho que esté tranquilo, que tengo un buen equipo y poco a poco iré cogiendo experiencia.
R2: ¿Con qué objetivos afronta la dirección de Cáritas La Rioja?LLL:
Los objetivos están más o menos marcados. En Cáritas celebramos una asamblea cada tres años y allí está representada toda la Diócesis. Los socios marcan los objetivos. Mi labor en Cáritas es hacer todo lo posible para llevar a cabo estos objetivos que son: luchar contra la pobreza oculta en diversos sectores sociales como las mujeres con mayor vulnerabilidad, mujeres maltratadas, prostitución, familias monoparentales..., las personas mayores y dependientes, el mundo rural y su falta de recursos, la inmigración y sensibilizar a la población riojana de todas esta injusticias.
R2: ¿Con qué medios cuenta Cáritas?LLL:
Son medios económicos y personales. Sin las personas dedicadas a Cáritas que lo hacen voluntariamente y con cariño sería imposible, aunque también son importantes los aspectos económicos. Estos viene por medio de donativos, subvenciones de poderes públicos ya que los problemas que tratamos también les atañen a ellos que para eso están... Contamos también con donaciones, herencias... y sobre todo con la solidaridad de la gente, la sociedad riojana es muy sensible.
Además, nuestro obispo Don Juan José Omella creó un fondo de crisis en el que se ha hecho un llamamiento a los sacerdotes para que aporten el 10% de su sueldo y han respondido de maravilla.
Las aportaciones particulares son también importantes.
R2: Hace poco tiempo supimos de los problemas por los que atraviesa Cáritas Chavicar debido, en parte, al recorte en la aportación económica de la Consejería de Servicios Sociales...LLL:
Así es, en anteriores ocasiones Servicios Sociales nos daba alrededor de 200.000 euros pero esa cifra la redujo, tendrían sus razones, pero si se reduce esa aportación nos veíamos obligados a cerrar nuestros centros ocupaciones. Incluso se planteó un ERE y al ver que iba a adelante, la Consejería nos llamó y se comprometió a ayudar a mantenerlos. Yo creo que vamos a poder mantener los tres centros. El de Santo Domingo y el de Calahorra lo va a gestionar el Gobierno Regional y el de Logroño, el Ayuntamiento.
R2: ¿Es seguro entonces que el de Logroño se mantiene al no contar con ayuda del Gobierno regional?LLL:
La comunidad autónoma asume la gestión de Calahorra y Santo Domingo porque son municipios de menos de 20.000 habitantes y en Logroño hay más de 20.000 y por eso hemos llegado a ese acuerdo. Estamos a punto de firmar los convenios y le agradezco a Menchaca que haya resuelto esta situación.
R2: ¿Cree que con el tema del mantenimiento de los centros se ha politizado a Cáritas?LLL
: Nosotros no hemos hecho nada más que lo que teníamos que hacer. Nos dan un subvención y nosotros la aplicamos, que nos la cortan pues no tenemos más remedio que asumirla. Lo que Cáritas no va a permitir nunca es que nadie nos utilice y no digo que nos hayan utilizado, pero Cáritas no lo va a permitir nunca. Que nadie se sirva de Cáritas, nosotros tenemos que cumplir con la finalidad con la que ha nacido Cáritas: servir a los ciudadanos más necesitados. No podemos vendernos , entre comillas, o aceptar condiciones que vayan en contra del espíritu de Cáritas.