La Reunión Ministerial de Diálogo Político UE-Brasil celebrada ayer en Madrid entre el ministro español de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Ángel Moratinos, la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad, Catherine Ashton, y el ministro brasileño de Relaciones Exteriores, Celso Amorim, parece haber dado sus primeros frutos.
Según ha informado el propio Amorim, la Unión Europea y el Mercosur avanzan hacia un Acuerdo de Asociación que podría firmarse en mayo próximo en Madrid durante la cumbre UE-Latinoamérica y el Caribe. En este sentido, el ministro brasileño señaló que “no sé si será el acuerdo final, pero sí un acuerdo que pueda ser firmado y que no sea simplemente una declaración de intenciones”.
Pese a la gran complejidad de la negociación comercial UE-Brasil, “hay una posibilidad muy concreta de avanzar y los últimos contactos han sido positivos, dada la gran disposición política por parte de la presidencia europea y de la presidencia de Mercosur por Argentina”, señaló Amorim.
Además, lograr un acuerdo con la UE “serviría de inspiración para la negociación multilateral”, añadió el ministro brasileño refiriéndose a la Ronda de Doha de la OMC, que se halla estancada.
Por su parte, Catherine Ashton destacó que “la Asociación Estratégica UE-Brasil constituye una de las relaciones más importantes y dinámicas que mantiene la UE”.
Entre los asuntos tratados en la reunión, Ashton señaló la coincidencia de posturas en cuanto a la reconstrucción de Haití y la importancia de las relaciones con Irán, temas en los que “Brasil tiene un papel clave que jugar”.
Además, este encuentro sirvió para establecer una colaboración entre los Veintisiete y Brasil con respecto a Haití. De esta manera, de cara a la próxima Conferencia de Donantes a Haití, a finales de marzo, la UE y Brasil colaborarán para reforzar al gobierno de Haití y el papel de Naciones Unidas en la estabilización del país, donde Brasil ocupa el mando de la fuerza internacional MINUSTAH y aporta un 20% del total de efectivos militares que se hallan en Haití, con un contingente de más de 2.000 soldados.
En cuanto a Oriente Medio,
el ministro Amorim informó a sus homólogos de la UE de las visitas oficiales que el presidente brasileño, Luis Inácio Lula da Silva, hará a Israel, Palestina y Jordania en marzo, y a Irán a mediados de mayo. Esta última constituye una oportunidad para abordar las diferencias que la comunidad internacional mantiene con Irán por su programa nuclear y el enriquecimiento de uranio.
El gobierno de Lula defiende desde hace tiempo una postura menos proclive a sanciones y más de mano tendida hacia el régimen iraní
que, según Amorim, “no es distinta de la de la UE en cuanto a los objetivos”. Ambas partes, dijo, aceptan el derecho de Irán a desarrollar la energía nuclear, pero Teherán debe “garantizar a la comunidad internacional la certeza de que lo hará con fines pacíficos”.