Las investigaciones de la policía sobre el caso de la desaparición, hace seis días, de la joven sevillana Marta del Castillo, han llevado a los agentes a sospechar que la menor subió a casa y estuvo un rato conectada a Internet uno de los ordenadores hasta que volvió a salir de la vivienda y desapareció.
Por este motivo se está investigando el ordenador de la familia, con el fin de encontrar una pista que lleve al paradero de Marta, por si hubiera quedado con alguien a través de la red. Según relató la familia, ellos mismos apagaron el router de conexión antes de irse y al llegar estaba encendido. Además, el bolso de la joven también estaba en casa.
Hasta ahora la última información sobre Marta era que había sido acompañada por un amigo hasta su portal sobre las 21.30. Sin embargo, en los informes policiales no se descarta de Marta subiera primero a casa para después volver a bajar, minutos antes de que se le perdiera la pista. Esta conclusión llega a raíz de que su ordenador estaba encendido cuando sus padres llegaron a casa y sus familiares aseguran que no lo estaba y que su bolso también estaba en la habitación. Así lo confirmó el propio padre, Antonio del Castillo, de la desaparecida quien en rueda de prensa indicó que su hija “pudo subir a casa” antes de que la viera por última vez una vecina en el portal alrededor de las 21.30 horas.
“Alguien la llamaría y saldría a esperar”, agregó Del Castillo, quien confirmó que el bolso de la joven estaba en casa y que Marta sólo llevaría encima el Documento Nacional de Identidad (DNI), “porque lo lleva siempre”. “Puede que sí bajara voluntariamente pero no se fue voluntariamente. Pongo mis dos brazos”, apuntó el padre. En esta línea, indicó que “si la niña estaba abajo en actitud de espera es porque alguien la llamaría al móvil o al porterillo”. “Mi hija era muy confiada y le daba la clave de su messenger a muchos amigos”, aseguró el padre, que tuvo que abandonar el lugar de la rueda de prensa por la emoción.
SULTÁN, UN PASTOR ALEMÁN 'BUSCAPERSONAS'
No es la única novedad que rodea este caso, ya que a esta causa se ha unido ahora un voluntario, Ernesto Cabrera, que ha viajado desde Lérida a Sevilla con su perro Sultán, un pastor alemán “especializado” en la búsqueda de personas desaparecidas, según informó hoy su dueño. Cabrera, que está en la capital hispalense desde anoche de forma altruista, indicó que lo primero que ha hecho es “descartar sitios”. “A la Policía le ofreceré las pistas que encuentre”, indicó el cuidador del can, quien aseveró que lleva nueve años trabajando de forma voluntaria para tratar de localizar “con éxito” a personas desaparecidas.
Al hilo de ello, explicó que Sultán realizó ayer por la mañana una batida en la barriada y “ha marcado una misma zona --en el entorno del barrio-- dos veces, por lo que hay que volver a comprobarla esta tarde”, sentenció.