El presidente chadiano, Idriss Déby, amenazó hoy con enviar sus fuerzas armadas a través de la frontera con Sudán para atacar a los rebeldes presuntamente respaldados por Jartum, e insinuó que podría romper las relaciones diplomáticas con su vecino.
Las relaciones entre ambos países se han deteriorado desde el comienzo del conflicto en la región fronteriza de Darfur, hace cinco años. Tanto milicianos como refugiados han cruzado desde entonces la frontera y han entrado en el este de Chad.
Déby acusa a Sudán de respaldar a los rebeldes chadianos que intentan derrocarle proporcionándoles en las últimas semanas cobijo y armas que les estarían permitiendo recuperarse de los últimos combates, los más intensos en meses.
“El complot del régimen de Jartum nunca tendrá éxito”, afirmó Déby ante cientos de mujeres que se manifestaron hoy en Yamena, la capital chadiana, para protestar contra Sudán. “No les permitiremos entrar en nuestro territorio. Les destruiremos en su guarida de Sudán. Les haremos comer polvo en el interior de Sudán. Sentirán el rayo de nuestras fuerzas de defensa”, aseguró.
Sudán, sin embargo, niega insistentemente estas acusaciones y acusa a Déby de respaldar a los grupos rebeldes sudaneses que combaten contra las fuerzas gubernamentales en Darfur.
Una de las reivindicaciones de la marcha de mujeres de hoy en Yamena era la ruptura de las relaciones diplomáticas con Sudán. “Lo que quieren las mujeres lo quiere Alá. El Gobierno examinará rápidamente esta petición con vistas a adoptar una postura en los próximos días”, indicó Déby.