El impacto de la crisis sobre el consumo turístico y el retraso en las reservas tanto de vacaciones como de viajes de empresa provocará una caída del 5,6% del PIB generado por el sector en 2009, según estimó hoy la alianza para la excelencia turística (Exceltur).
Exceltur aseguró que la menor llegada de turistas (un 16,3% menos en el primer trimestre) y el recorte de su gasto medio diario (un 13,3% hasta enero) ha provocado que el PIB turístico caiga un 7% en los tres primeros meses del año, frente al descenso del 1,6% que se contabilizó al cierre de 2008.
Según el 'lobby turístico', que revisó a la baja sus previsiones presentadas en enero, indicó que este dato debe acogerse con “cautela” pese a que todos los indicadores señalan que el segundo trimestre de 2009 será “complejo”, marcado por la “poca visibilidad” a medio y largo plazo, y evidenciado por el descenso de la rentabilidad registrado hasta marzo, prácticamente en todos los sectores y en todas las comunidades autónomas, salvo Canarias que finalizó con cierto repunte pese a acusar más intensamente la crisis.
“Nos encontramos en el momento medular de una crisis que está afectando de lleno al turismo español”, aseguró el vicepresidente ejecutivo de Exceltur, José Luis Zoreda, quién añadió que “la mejor de las hipótesis” es que se produzca un cambio de esta tendencia decreciente a finales del cuatro trimestre del año.
Entre las razones que hay detrás de esta contracción de la actividad turística se encuentra la caída generalizada de la demanda, especialmente de turistas extranjeros procedentes del Reino Unido (-20%) y de Alemania (-26%), frente a países competidores en destinos de 'sol y playa' como Francia, Italia, Portugal o Turquía, con descensos menos intensos.
110.000 EMPLEOS MENOS
Por otro lado, Exceltur estimó un recorte “dramático” de 110.000 empleos en el sector turístico hasta junio, teniendo en cuenta que en los tres primeros meses del año ya se produjo un recorte de 86.000 empleos (un 5,7% del empleo del sector). De hecho, subrayó que el 70% de las empresas turísticas han tenido que abordar recortes de plantilla, según se constata en la Encuesta de Clima Empresarial elaborada por Exceltur.
En cuanto a los ingresos procedentes del turismo, Exceltur prevé una caída del 6,4% en 2009, en base a un descenso estimado del 6% en el número de turistas extranjeros y del 8,1% en el número de pernoctaciones para el conjunto del año.
En esta línea, Zoreda destacó que durante el primer trimestre del año, el periodo de menor peso en función de la demanda turística, se han acentuado las caídas de beneficios entre las empresas del sector, algunas de las cuales “técnicamente han entrado en pérdidas”.
El 83% de las empresas turísticas españolas vieron caer sus ventas durante los tres primeros meses del año, con fuertes caídas respecto al mismo periodo de 2008 en el 50,8% de los casos. Concretamente, más del 90% de las agencias de viajes y touroperadores manifestaron descensos en sus ventas en el primer trimestre.
Por subsectores, sólo las estaciones de esquí, por las excepcionales condiciones de nieve de este año, y los trenes de largo recorrido registraron incrementos. Así, un 63,2% de las estaciones invernales incrementaron sus ventas, frente al 69% de los empresarios de golf y al 56,4% de los dedicados al ocio cultural que vieron mermar sus beneficios, según la encuesta realizada por Exceltur.
En cuanto a la vía de entrada de turistas, es destacable la fuerte caída de pasajeros que han sufrido las aerolíneas (-18,2%), frente a un “mejor comportamiento” para el transporte ferroviario que gana cuota de mercado (+9,5).
NINGÚN DESTINO SE SALVA
Por destinos, el balance tampoco es positivo con una caída de las pernoctaciones hoteleras, según reflejan los datos del INE, especialmente en destinos urbanos, donde sólo Santiago de Compostela y Fuerteventura (Canarias) registran incrementos.
Canarias cerró el primer trimestre de 2009 con una “intensa” caída del 10,5% en las pernoctaciones hoteleras, producto de “la sobreoferta, la irregular competencia en precios y la menor oferta de vuelos” y Baleares registró el mayor descenso porcentual (-23%).
Las principales ciudades españolas acusaron caídas en el RevPar --ingresos por habitación disponible-- por encima del 20%. Concretamente, Valencia fue la más afectada con una caída del 45,1%, Madrid disminuyó un 23,8%, seguida de Barcelona (-28,2%) y Sevilla (-6%).
Finalmente, Exceltur cifró una caída de los precios hoteleros en torno al 10% para 2009 (en febrero fue del 5,1%). “La actual estrategia de fuertes ofertas y descuentos nos lleva a pensar que esta tendencia se acentúe hasta el verano, cuando volverá a mantenerse en los niveles del año pasado”, apuntó Zoreda.
SEMANA SANTA, “PEOR” QUE EN 2008
En lo que se refiere a la campaña de Semana Santa, Zoreda confirmó que el balance de este año ha sido “claramente peor” que el del año pasado, por efecto de la crisis y de las malas condiciones climatológicas, y a pesar de apelar a “fuertes descuentos” para evitar que la ocupación siguiera cayendo.
Así, el 75,2% de las empresas turísticas españolas registró peores resultados frente a la Semana Santa de 2008, pese a incrementarse la oferta hasta un 20% en los últimos dos años, con un recorte de precios que en algunos casos llegó al 50%.
Por destinos, sólo Baleares al haberse reducido la oferta por mantenerse más de la mitad de su planta cerrada, y en Andalucía, especialmente en Costa del Sol y Sevilla, destinos tradicionales en estas fechas, han obtenido resultados más favorables. Por contra, los empresarios turísticos de la Comunidad de Madrid (84%) y de Murcia (83%) registraron empeoramientos en los datos frente a 2008.
Ante este panorama, desde Exceltur se quiso trasladar un mensaje de esperanza y se realizó un llamamiento al sector para evitar entrar en una guerra de precios que termine por ser deflacionaria a las puertas de la temporada estival ya que “por el momento, el verano se salvará”.
Finalmente, Zoreda apuntó la necesidad de concienciar al sector de que “el riesgo” está también en el turismo nacional en estos momentos, además de insistir en que se deben afrontar dos retos: cómo salir de esta crisis y poner las medidas necesarias para que el turismo español sea más competitivo a largo plazo.