La ceremonia de entrega de los Premios Príncipe de Asturias 2007 se convirtió ayer en un alegato en defensa de valores como la tolerancia, el respeto por la diversidad cultural, la democracia y la dignidad humana. La ceremonia fue traducida a cuatro lenguas -francés, alemán, inglés y hebreo-.
El Príncipe de Asturias, Don Felipe de Borbón, se comprometió durante su intervención a contribuir a “hacer de España una sociedad más cohesionada en torno a valores de la Constitución” y resaltó los valores de los galardonados, que representan “la lucha por la vida y la dignidad de las personas”.
La emotiva gala celebrada en el Teatro Campoamor de Oviedo, bajo la presidencia de los Príncipes de Asturias, contó con la asistencia de seis de los ocho galardonados. No fue posible que estuvieran sobre el escenario para recoger el galardón Bob Dylan (Artes) ni el sociólogo Ralf Dahrendorf en cuyo nombre fue entregado el premio a su esposa Christiane Dahrendorf.
Ésta pronunció unas palabras en nombre de su marido con las que agradeció el premio como “un reconocimiento a unas Ciencias Sociales de las libertades”. “Mi marido sabe que coincido con él aunque mi vida no sea de política ni de ciencias sociales, sino de medicina y arte: o del individuo más que de las teorías. Eso significa que intentamos tener puentes entre tres culturas”, leyó Christiane Dahrendorf.
Uno de los momentos de mayor emotividad se produjo durante el minuto de silencio que el Campoamor rindió en memoria de todas las víctimas del Holocausto a petición de los galardonados con el Premio Príncipe de Asturias de La Concordia, el Yad Vashem, tras recoger el galardón. El silencio quedó roto por un gran aplauso del público a los diez representantes de supervivientes del genocidio y Justos entre las Naciones que se encontraban de pie enlazados por las manos.
Los galardonados estuvieron arropados durante la ceremonia por una amplia representación institucional y de autoridades internacionales de diferentes ambitos. El Gobierno español estuvo representado por los Ministros de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos; Educación, Mercedes Cabrera, y Cultura, César Antonio Molina. Además de los Príncipes de Asturias, en representación de la familia real acudió como cada año la Reina Doña Sofía que ocupó su palco de honor en el Campoamor.
En la lista de autoridades destacaba además del presidente del Congreso, Manuel Marín, la presidenta del Tribunal Constitucional Manuel Marín, el presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, y el ex presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga, además del Gobierno regional con el presidente Vicente Álvarez Areces a la cabeza, y representantes de las principales instituciones autonómicas. Los premiados acudieron además arropados por una delegación institucional de su país.