El responsable sectorial del sector energético de la Federación de Industria, Construcción y Agro (FICA) de UGT La Rioja, Enrique Echazarra, ha subrayado tras la concentración celebrada esta mañana en la entrada de la Central Térmica de Arrúbal, con motivo de la huelga convocada por la representación legal de los trabajadores para esta semana, que “los trabajadores que están trabajando en este momento están cumpliendo con los servicios mínimos para que funcione la central, y aquellos fuera de turno han venido a apoyar la concentración y la huelga”.
Echazarra ha explicado que “la planta dispone de dos grupos de 400 megavatios (MW) y cobra de los presupuestos del Estado por la disponibilidad de ambos grupos para la generación de energía eléctrica en caso de ser necesario y según la demanda”.
El ugetista ha recordado que la central de ciclo combinado de Arrúbal, en manos del grupo inversor extranjero ContourGlobal, “lleva más de 5 años operando con menos personal que los servicios mínimos establecidos en las huelgas generales de los años 2010 y 2012”.
“En el año 2015 ContourGlobal decidió hacer una restructuración de personal reduciendo los turnos de operación de 3 a 2 personas, por debajo de los servicios mínimos establecidos en las huelgas generales anteriores, sin que cambiara ninguna circunstancia para ello, siendo el único argumento de la empresa que el funcionamiento seria residual”, ha afirmado.
Recientemente, “la empresa unilateralmente ha impuesto un cambio sustancial de las condiciones de trabajo, que supone la eliminación del 25% del personal y los retenes actuales, de una plantilla de tan solo 37 trabajadores y trabajadoras”.
Así, Echazarra ha denunciado que “teniendo en cuenta que el personal disponible actualmente ya se encuentra por debajo de los servicios mínimos establecidos con anterioridad, una nueva reducción de personal podría comprometer gravemente tanto la seguridad como el funcionamiento de la planta en caso de que el sistema eléctrico requiera sus servicios al 100% de su capacidad”.
Además, el responsable del sector energético de FICA-UGT La Rioja ha remarcado que la central se encuentra entre las 10 empresas que más facturan el La Rioja y “despedir a 8 trabajadores demuestra muy poco compromiso con nuestra comunidad”.
Por último, Echazarra ha insistido en que desde el inicio de la pandemia esta central ha sido declarada como servicio esencial y la reducción de la plantilla no puede prevenir situaciones que la COVID-19 pueda causar.