El mundo del trabajo se enfrenta a cambios estructurales, debido a las crecientes tendencias migratorias, al impacto de las nuevas tecnologías y a nuevos requerimientos ambientales. Y todo ello, en un contexto de desigualdad creciente, lo que hace necesario acometer “una transición justa”, en palabras de Joaquín Nieto, director de la Organización Internacional del Trabajo para España. “Las generaciones venideras podrían vivir peor si no se hace un cambio profundo”, ha asegurado.
Nieto es uno de los participantes en los Cursos de Verano de la Universidad de La Rioja que organiza CCOO. Durante la jornada de hoy, el Aula Magna del Edificio Quintiliano acoge varias ponencias y debates bajo el título 'Los trabajadores ante la nueva estructuración del capital“.
El futuro del trabajo es una de las cuestiones que se aborda en los cursos. Nieto ha trasladado la incertidumbre y preocupación existentes en el mundo del trabajo ante los cambios que se avecinan, que no tienen por qué ser malos.
“Las nuevas tecnologías pueden crear ganancias de productividad que, si se reparten, generarán nuevos puestos de trabajo en educación y cuidado de las personas, se puede renovar la economía hacia una economía verde...pero para ello hay que hacer una transición justa y eso requiere diálogo social”.
Si no se realizan cambios en la fiscalidad, la protección social y el medio ambiente, “la sociedad puede colapsar”, ha advertido Nieto.
Joan Herrera, director de la Escuela Superior de Cuadros de CCOO, también ha participado en los cursos y ha subrayado la necesidad de que el mundo del trabajo recupere “centralidad”. “Nos dicen que salimos de la crisis, pero a costa de los salarios y de las condiciones de trabajo. Intentan que el mundo del trabajo tenga menos fuerza”.
Ante esta situación, debe ser una prioridad, para Herrera, “ganar en igualdad en una de las sociedades más desiguales de Europa. El gran reto es cómo responder a la precariedad”.