Los Knicks y los Nuggets decidieron olvidarse de los golpes bajos -casi un año despues del improvisado ring montado en el Madison Square Garden por los púgiles Anthony, Camby y siete pesos pesados más- para resolver a su favor el partido del morbo a golpes, de efecto. Los Nuggets tuvieron siempre contra la lona a los de Isaiah Thomas que, reforzados por la epica del Garden, resistieron cada uno de los cruzados propuestos por los chicos de George Brown para, en el ultimo asalto, lograr la segunda victoria del curso por un contundente 119-112.
Los Knicks ganaron porque, siendo un agregado montado sobre la figura de Marlbury, les pesó más la responsabilidad colectiva del juego ante unos Nuggets que, aunque todavía no sospechan como pudo escapárseles el encuentro, jugaron al pautado dictado por Iverson y Anthony (inconstante el primero, decisivo hasta el ultimo cuarto el segundo).
Salvo el espejismo inicial (7-2), Denver fue siempre por delante. Las acciones más espectaculares se resolvieron a favor de los Iverson-Anthony, con irrupciones estelares de Kleiza o Najera. Sin darse cuenta, los del Medio Oeste se colocaron quince arriba (35-50, minuto 17) pero incomprensiblemente dilapidaron su renta.
Los Knicks hicieron la goma todo el partido (empate a 60 a poco del descanso, 82-82 a cuatro minutos para la conclusion del penultimo cuarto) pero en el ultimo asalto, y después de desaprovechar hasta cinco ocasiones para ponerse por delante, dar la vuelta al partido (103-102).
Fue a partir de ahi cuando el colectivo neoyorkino (Curry, Randolph y, especialmente,un gattuso de siete pies de altura llamado Renaldo Balkman) lució antes unos Nuggets que decidieron cargar sobre Anthony toda la responsabilidad. Y el boricua acabo con sus huesos en la luna, en un combate, esta vez deportivo.R2/N.Y.