Al igual que hicieran el presidente de Israel, Simón Peres, y de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas, el presidente iraní ha invitado al jefe de Estado de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, a que ayude en la búsqueda de la paz en Oriente Próximo.
Mahmud Ahmadineyad se encuentra en Brasil en su primera visita oficial al país, donde ha defendido el polémico programa nuclear que adelanta su gobierno, del que reiteró que apunta a la generación de energía y reafirmó que no oculta objetivos militares.
Este encuentro tiene como objetivos promover las relaciones económicas y comerciales entre Irán y Brasil, así como la inversión bilateral.
Se trata de la tercera reunión que los dos presidentes mantendrán, después de los encuentros en Ecuador y Estados Unidos previamente, aunque se espera que Lula le devuelva la visita y se desplace a Irán en el primer semestre de 2010, informó el diario brasileño 'Fohla'.
La visita de Ahmadineyad a Brasil ha despertado críticas tanto dentro como fuera de Brasil por parte de organizaciones ligadas a la comunidad judía, grupos religiosos y defensores de los derechos humanos.
Sin embargo, el gobierno brasileño, que fue uno de los primeros en reconocer la reelección de Ahmadineyad en los polémicos comicios presidenciales de junio pasado y que ha defendido el derecho de Irán a dotarse de la tecnología atómica para fines pacíficos, rechaza las críticas por su política de no intervención en asuntos internos de terceros países y al considerar que aislar a Irán de la comunidad internacional debido a su programa nuclear sería contraproducente.
Ambos mandatarios abordarán las posibilidades de cooperación en materia de biotecnología, nanotecnología, agrícola, energética y cultural, así como cuestiones de interés regional e internacional, de acuerdo con un comunicado del Ministerio de Exteriores brasileño, difundido por Prensa Latina.
“Lo que hemos defendido durante mucho tiempo es que Irán tenga el derecho a desarrollar el enriquecimiento de uranio para fines pacíficos, al igual que Brasil lo está haciendo. Es simple”
, explicó Lula en rueda de prensa conjunta tras mantener una reunión con su homólogo iraní en Brasilia. “Lo que defendemos para nosotros defendemos para los otros”, apostilló.
Por otra parte, Lula defendió “el papel decisivo” que Irán podría tener en Oriente Próximo, mientras que, por su parte, Ahmadineyad defendió que Brasil también debe actuar de puente entre Irán y América Latina.
“La búsqueda de un entendimiento exige colaboración de todos
los que intervengan en un proceso de paz y se deben crear canales de confianza y esfuerzos para la paz en Oriente Próximo“, concluyó Lula. ”Defiendo la paz en el Oriente Medio, el Estado palestino, para que todos puedan vivir en armonía en el mundo contemporáneo“, recalcó.
Tras esta visita, el presidente iraní tiene intención de viajar hacia Venezuela y Bolivia, firmes aliados del régimen de los ayatolas en el continente latinoamericano.