El Octavio Pilotes Posada, liderado por un espectacular Xavi Díaz en la portería y por un efectivo Ivan Cupic, dio un paso de gigante para asegurar su permanencia en la Liga ASOBAL y, de paso, alarga la crisis de un Antequera que suma ya cinco derrotas consecutivas.
El encuentro no empezó nada bien para los intereses andaluces, ya que en los primeros cinco minutos el Octavio, amparado en su fuerte sistema defensivo, logró adquirir una ventaja de cuatro goles (5-1, m.5).
El equipo de Antonio Carlos Ortega estaba atascado en ataque, cometía muchas imprecisiones en la circulación de balón y no encontraba cómodas posiciones de lanzamiento.
No obstante, una exclusión del croata del Octavio Nicola Prce la supo explotar el Antequera para devolver la igualada al electrónico tras un parcial 0-4 (5-5, m.10).
En el partido había mucha tensión y era evidente que el que mejor defendiera se iba a llevar el encuentro, pues en ataque los dos conjuntos estaban muy fallones.
Ni siquiera el continuo movimiento de jugadores en ambos equipos sirvió para resolver los preocupantes problemas en el juego posicional de Octavio y Antequera.
Aún así, y después de cuatro minutos en el que ninguno de los dos logró marcar, el Antequera supo aprovechar el desconcierto local para tomar una renta de dos goles (7-9, m.20), gracias, sobre todo, a la espectacular exhibición de Xavi Pérez en la portería -nueve paradas en el primer tiempo-.
El entrenador gallego, Quique Domínguez, viendo que en ataque no había solución a los problemas en el juego estático, optó por cambiar al portero -Xavi Díaz sustituyó a un desacertado Iván Martinovic- como revulsivo.
Y la táctica no pudo salirle mejor al Octavio, ya que las paradas del portero gallego y los goles del extremo croata Ivan Cupic permitieron darle la vuelta al marcador en el inicio del segundo tiempo después de un parcial 4-1 (15-13, m.35).
El Antequera, que no atraviesa por su mejor momento, era un auténtico desastre en ataque. Al equipo de Ortega se le atragantó la defensa profunda planteada por Quique Domínguez y su único recurso eran las individualidades de Jorge García Vega o el juego con el pivote Paco Bustos, ya que el técnico andaluz no movía el banquillo, demostrando poca confianza en los laterales Rune Ohm y Michael Jahns.
Pero el Octavio se empeñó en darle emoción al choque con sus continuos fallos ante un Xavi Pérez que mantuvo el nivel del primer tiempo y que se unió al festival de paradas que estaba dando Xavi Díaz en la portería gallega, el auténtico artífice de que su equipo abriera una pequeña brecha en el marcador (22-18, m.53).
En los últimos minutos, y, después de seis minutos sin marcar, el Antequera lo intentó a la desesperada con una defensa 4-2, pero los pupilos de Ortega ya no lograron recortar la desventaja ante un Octavio que se hace fuerte en su casa con su segunda victoria consecutiva.