La Delegación del Gobierno de Madrid dio órdenes a la policía de no actuar excepto en casos de vandalismo, extremo que no se produjo. Sabían que la situación era y es delicada para los gobiernos regional y central, que en las postrimerías de las elecciones municipales y autonómicas los ánimos se han ido encendiendo.
La Junta Electoral Provincial prohibió las manifestaciones de la pasada madrugada, pero la desobediencia voluntaria de miles de jóvenes desbordó esa orden y, de nuevo, el centro de Madrid fue tomado por los integrantes y simpatizantes de las plataformas que integran Movimiento 15-M. Los agentes policiales se limitaron a crear un cordón y vigilar que la situación se mantuviera bajo control. Otra noche más, cartones, lonas, pancartas y consignas contra la clase política, que mira para el lado contrario señalándose unos a otros como culpables.
Pero, esta mañana ha sido la Junta Electoral Central la que ha entrado en el asunto y decidirá si prohíbe las concentraciones de esta próxima madrugada. A las 17:00 tendrá lugar ese encuentro en el Congreso de los Diputados. Se analizará la convocatoria de las concentraciones en diversas ciudades españolas por parte del Movimiento 15-M, entre otros asuntos relacionados con la campaña electoral.
Según han informado fuentes de este órgano, la decisión que deberá adoptar la JEC se refiere, en principio, a una consulta presentada por la Generalitat de Cataluña respecto a la convocatoria de manifestaciones de protesta para el próximo sábado 21, jornada de reflexión. Cuenta ya con el precedente del 13 de marzo de 2004 cuando miles de personas se concentraron ante las sedes del PP de toda España.
En aquella ocasión la JEC adoptó una resolución en la que declaró contrario a la regulación de la campaña electoral las concentraciones que hubo. Y según las mismas fuentes, hasta última hora de ayer no había llegado al máximo órgano arbitral electoral ningún recurso planteado por los promotores de las concentraciones que fueron prohibidas por las Juntas de varias provincias, entre ellas Madrid, donde tuvo lugar la concentración más numerosa.