La aviación rusa ha bombardeado la base aérea militar de Vaziani, a las afueras de Tiblisi, según informó a Reuters un alto responsable georgiano de seguridad, Kaja Lamaia. “Nadie resultó herido, pero algunos edificios resultaron destruidos”, precisó. La base se encuentra a unos 25 kilómetros de la capital. “Nos han declarado la guerra”, añadió.
Por su parte, el Ministerio georgiano del Interior aseguró al portal de información Civil.Ge que la aviación rusa lanzó dos bombas y confirmó, en boca de su portavoz, Shota Utiashvili, que “no hubo heridos ni daños importantes”.
El Ministerio de Defensa ruso aseguró hoy que protegerá a la población civil así como a las fuerzas de paz rusas que se han visto atrapadas en los combates entre las tropas georgianas y los separatistas de la región secesionista de Osetia del Sur.
“Los dirigentes georgianos han lanzado una sucia aventura”, afirmó el Ministerio en un comunicado. “La sangre derramada en Osetia del Sur será responsabilidad de esta gente y de sus aliados”, añadió el comunicado, en el que el Ministerio asegura que “no permitiremos que nuestras fuerzas de paz y los ciudadanos de la Federación Rusa resulten dañados”.
Precisamente, el comandante de las fuerzas de paz rusas desplegadas en Osetia del Sur, Marat Kulakhmetov, informó hoy de soldados muertos y heridos a consecuencia de ataques contra sus unidades por parte del Ejército de Georgia, sin precisar cifras. También aseguró que Tsjinvali, la capital de Osetia del Sur, está “casi totalmente destruida” a causa de las “muchas horas de bombardeos con armamemto pesado” por parte del Ejército georgiano, según declaró a la agencia rusa de noticias Interfax. “Las tropas georgianas abrieron fuego directo contra las bases de emplazamiento de las tropas rusas en Tsjinvali”, señaló un portavoz a la agencia RIA Novosti. En cuanto a la población de Osetia del Sur, se calcula que hasta el 90% no son de origen georgiano y poseen pasaporte ruso.
“ATAQUE TRAICIONERO”
También el Ministerio de Exteriores ruso emitió un comunicado denunciando el “ataque traicionero” llevado a cabo por Georgia en Osetia del Sur tan sólo horas después de que se acordara iniciar conversaciones para resolver el conflicto.
Según Exteriores, “los dirigentes georgianos han recurrido al uso de la fuerza peses a todos los esfuerzos diplomáticos realizados en los contactos entre Moscú, Tiblisi, Tsjinvali, Washington y otras capitales preocupadas”.
En opinión del Ministerio de Exteriores ruso, “la credibilidad de las autoridades georgianas como participante responsable en el proceso de negociación (...) ha quedado completamente minada”. “Ahora se entiende claramente por qué durante un largo periodo de tiempo Tiblisi ha evitado obstinadamente bajo varios pretextos concluir acuerdos legalmente vinculantes con Osetia del Sur y Abjazia sobre el no uso de la fuerza”, añade el texto.
No obstante, según el departamento que dirige Sergei Lavrov, “no es todavía demasiado tarde para evitar un derramamiento de sangre a gran escala y nuevas víctimas, incluidos civiles”. Tiblisi “debería pensarlo mejor y volver a métodos civilizados de resolver cuestiones complicadas de carácter político”, prosigue el comunicado.
Por último, Moscú expresa su deseo de que “nuestros socios extranjeros y la comunidad internacional en su conjunto no permanecerá indiferente en este difícil momento cuando los destinos de cientos de miles de personas que viven en la región se están decidiendo”.