Santos defiende la compensación a las víctimas

Tras una semana de éxitos frente a las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), el gobierno colombiano de Juan Manuel Santos está volcado en la defensa de su propuesta de ley ante el Congreso.

De esta manera, el propio Santos ha manifestado que esta medida, que busca compensar a las víctimas de la violencia en el país, es “una deuda moral” con los afectados por el conflicto y un instrumento necesario para alcanzar la paz.

“La Ley de Víctimas, la Ley de Tierras y todas las leyes que estamos presentando ante el Congreso tienen un hondo significado: buscar que realmente en nuestra sociedad exista el espíritu de la paz, que nos perdonemos los unos con los otros, que les demos oportunidades a quienes han sufrido la violencia durante tantos años, que puedan nuevamente mirar la vida con dignidad y optimismo en el futuro”, señaló Santos durante la inauguración del Congreso Nacional de Autoridades Municipales, un evento celebrado en Cali y al que asistieron alcaldes de toda Colombia.

“¿Cuántos miles de campesinos no fueron desplazados de sus parcelas por la violencia, por los violentos? Ahí se origina buena parte de la violencia que nos ha afectado durante tanto tiempo”, afirmó el presidente colombiano en declaraciones recogidas por los medios locales.

Santos recalcó que la iniciativa de ley presentada por su gobierno el pasado lunes “es una deuda moral que tenemos que pagar los colombianos”.

Las declaraciones del mandatario colombiano se produjeron horas después de que el Partido Conservador, a través del diputado Heriberto Sanabria, criticara el proyecto de ley de víctimas del gobierno por considerar que es inviable financieramente.

Más de 3 millones de personas en Colombia se encuentran desplazadas de sus hogares como consecuencia del conflicto iniciado hace ya más de cuatro décadas en el país latinoamericano.

La iniciativa presentada por el gobierno contempla medidas como asistencia en salud y educación, ayuda humanitaria de reacción ante nuevos hechos de violencia y restitución de tierras, para que los desplazados por el conflicto puedan volver al estado en que se encontraban antes de que sus derechos fueran vulnerados.

Raúl Reyes, aún presente

Por otro lado, la sociedad colombiana (al igual que la comunidad internacional) ha conocido más detalles sobre el fallecimiento del número dos de las FARC, Luis Édgar Devia Silva, más conocido como Raúl Reyes, en 2008 en el marco de la Operación Fénix.

Reyes murió por dos disparos en la cabeza cuando estaba a punto de sufrir un infarto durante el bombardeo del Ejército colombiano al campamento en el que se alojaba en la selva de Angostura, en Ecuador, según un informe de Medicina Legal hecho público este miércoles por RCN Radio.

Las radiografías del cráneo del guerrillero evidencian que falleció a causa de dos proyectiles del calibre 5.56 que se internaron en la cavidad por el parietal izquierdo después de perder un pie por una bomba y poco antes de sufrir un paro cardiaco por el taponamiento de dos venas coronarias.

La emisora hizo referencia también a un registro fotográfico que contiene imágenes del cadáver de Raúl Reyes en el momento en que entró en las instalaciones de Medicina Legal para someterse a una autopsia que duró cuatro horas.

Estos documentos apuntan a que la necropsia del número dos de la guerrilla fue menos complicada que la de su comandante militar, Víctor Julio Suárez Rojas, alias Mono Jojoy , cuyo cuerpo presenta numeroso daños tras ser abatido este fin de semana en el departamento de Meta (centro), en el marco de la Operación Sodoma.