“No os preocupéis, estamos todos bien y no va a pasar nada. El hotel está extremadamente preparado”, escribían en torno a la media noche, hora española, los Santos Hipólito desde su habitación al borde del mar. La familia riojana que ha quedado atrapada en las diminutas Islas Turcas y Caicos por el huracán Irma, anunciaba también en el chat familiar que estaban ya casi en el ojo del huracán y, a pesar de ello, seguían teniendo luz, agua e internet.
Pasadas las cinco de la madrugada llegaban nuevos mensajes. Anunciaban que seguían “bien, con la lógica preocupación” y que creían que ya había pasado la mitad. Daban gracias a sus familiares por todo el apoyo y se disculpaban por tenerlos sin apenas dormir todos estos días. “De momento todo bajo control”, anunciaban para añadir poco después que el fortísimo temporal empezaba a amainar.
La mayor preocupación parece por lo tanto que ya ha quedado atrás. Falta ahora saber cuándo podrán coger un avión que los traiga de regreso a España.