Manuela Carmena reaparece en la presentación de su libro: “No tengo ninguna oferta del Gobierno”
Manuela Carmena ha reaparecido en Madrid para presentar su libro 'A los que vienen' (editorial Aguilar) tras las elecciones del 10N que la devolvieron a la imagen pública por su apoyo a Más País. Un mes después de aquella cita electoral, con malos resultados para el partido que la movilizó, la exalcaldesa de Madrid niega que haya recibido ofertas del Gobierno para volver a la política, pese a que su nombre ha sonado en las quinielas de las candidatas a Defensora del Pueblo.
“No he recibido ninguna oferta”, zanja con claridad. “Mi concepción es que la política no es una carrera. Es aceptar una responsabilidad. En esa me muevo, en la institucional, que depende de miles de cosas, pero no es para mí un objetivo”. Dice que, de momento, está centrada en crear “una fundación para la ética en política” y en escribir un libro de cuentos. El limonero de su casa sigue dando limones. “Me siento extraordinariamente feliz y dueña de mi tiempo”, ha resumido en el acto de presentación del libro, en el Café Comercial de Madrid.
Carmena ha evitado valorar los resultados de Más País, con tres diputados y parte del Grupo Mixto, porque no es su partido. “No me parece que sea la persona interesante para eso. No estoy afiliada a nada y no tengo capacidad para hacer esos análisis que hacen de manera abundante los tertulianos y politólogos”, ha respondido. Tampoco aclara si va a desempeñar algún papel en la formación de Íñigo Errejón en el futuro.
'A los que vienen' se dirige a los jóvenes que quieren cambiar el mundo. A los que les han dicho “que eso no puede hacerse”. Carmena dedica un capítulo al ecologismo con una mención especial a la activista Greta Thunberg -“una de las vuestras”, así la define- como figura inspiradora. “Los adultos no supimos estar a la altura”, escribe.
Las páginas recogen también pequeñas memorias de sus vivencias como alcaldesa en el Ayuntamiento de Madrid. Carmena recuerda la campaña contra Madrid Central y admite que tuvo éxito “entre los grupos más reaccionarios”. Con el recorte de las restricciones sobre la mesa del nuevo Ayuntamiento, la exalcaldesa alerta: “Las políticas por el clima exigen una estructura de coordinación en la alternancia política. Esa alternancia no puede dar la vuelta a todo”. “Me encantaría decirles: dejadme dos años más para terminar las cosas que habíamos empezado”, admite.
En los capítulos aborda el concepto de patria y reflexiona sobre cómo la izquierda ha rechazado, a su juicio, el sentimiento religioso por considerarlo incompatible con la lucha de clases. Relata cómo unas señoras le preguntaron al llegar a la alcaldía si iba a “cerrar las iglesias” y que los trajes de aquellos Reyes Magos secularizados, recordados por el “jamás te lo perdonaré, Carmena” de la actual portavoz parlamentaria del PP Cayetana Álvarez de Toledo, fueron un error porque “eran muy feos”.
También habla de los partidos y de cómo se articulan las jerarquías. La configuración de las listas al Ayuntamiento de Madrid, cuando ella era alcaldesa, generaron un desencuentro irresoluble con Podemos que desembocó en la formación de un nuevo partido, Más Madrid. “Los partidos políticos acaban convirtiéndose en centros cerrados donde se sustentan ideologías que pontifican y que se expresan en posturas unánimes en los órganos parlamentarios, donde no cabe salirse de las líneas ordenadas desde las correspondientes direcciones”, critica. En las páginas alude directamente a Podemos como “aquel partido que que quería ser diferente a todos” y “comienza a parecerse demasiado a los partidos tradicionales”. “Sobre todo a los partidos clásicos de la izquierda”, apostilla.
La exalcaldesa también ha lanzado mensajes directos al nuevo Ayuntamiento. “Puede acabar con esto si quiere”, ha asegurado sobre los demandantes de asilo y refugio que llegan a la ciudad y terminan durmiendo en la calle con menores a las puertas del Samur Social. “Hay que poner camas, la emergencia es así. Es como cuando se cae un edificio. Lo primero es no dejar a la gente durmiendo en la calle porque tiene cantidad de espacios. El Ayuntamiento puede acabar con esto si quiere”.