El Servicio Madrileño de Salud (Sermas) presentó el viernes sus cuentas anuales de 2022 en el último consejo de administración de la legislatura en el que también están los sindicatos de la mesa sectorial. Tras analizar las cifras presentadas, Comisiones Obreras denuncia que el gasto en conciertos y contratos con la sanidad privada se ha duplicado este año, con un incremento interanual del 82%. El SERMAS vuelve a gastar mucho más de lo presupuestado en las cuentas regionales: de los 8.783 millones previstos, el gasto se ha disparado hasta los 11.439,7 millones de euros, que CCOO atribuye a este gasto en conciertos y en contratos con empresas vinculadas a la sanidad. Un incremento de 2.513 millones de euros motivado en gran parte por un aumento del 55,9% en conciertos hospitalarios.
“Las cuentas del Gobierno regional no cuadran, en lo que se refiere a Sanidad”, denuncia el sindicato, que votó en contra de las cuentas presentadas por el Sermas. El “desvío” de las cuentas, que presentó el Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso se explica “por un incremento muy notable de los gastos en conciertos hospitalarios, más de 695,1 millones de euros, un 55,9% más que en 2021”, hasta alcanzar “los 1.938 millones de euros”.
“En el histórico se observa que, desde el año 2019, este gasto casi se ha duplicado (+94,1%)”. La quinta parte del presupuesto total actual, añaden, se destina a privatización de servicios. La Consejería de Sanidad acusa al sindicato de confundir los términos de contabilidad financiera y presupuestaria al hablar de desvío en las cuentas, señala la agencia Europa Press. Según recalcan desde el departamento que dirige Enrique Ruiz Escudero, todas las comunidades autónomas presentan diferencias entre el presupuesto y el gasto real en materia de Sanidad.
Además de los conciertos hospitalarios iniciados en la época de Esperanza Aguirre, en CCOO explican a elDiario.es que hay otros servicios transferidos a empresas relacionadas con la sanidad que explican este aumento presupuestario destinado a la sanidad privada, tales como análisis, pruebas diagnósticas o la donación de sangre privatizada en favor de la Cruz Roja. “Mientras se disparan las transferencias de dinero hacia la sanidad privada, existe una reducción en el resto del gasto corriente en bienes y servicios (donde se encuentran los distintos suministros) de unos -75,9 millones de euros (-2,9%)”, denuncian desde el sindicato.
Menos profesionales
Llama la atención otro de los datos que recoge CCOO sobre las cuentas presentadas. El personal de la sanidad pública ha descendido en 3.947 personas en un año. Si en marzo de 2022 la plantilla constaba de 82.445 profesionales, en marzo de 2023 ha disminuido hasta las 78.498 personas. También es menor que la que había en marzo de 2021, cuando trabajaban en el Sermas 83.401 profesionales.
“Estos hechos y datos contrastan con la necesidad de profesionales en la Comunidad de Madrid, y con las enormes listas de espera, y demoras en Atención Primaria o la no devolución de derechos arrebatados a las plantillas como la jornada de 35 horas”, denuncian desde CCOO. “Se constata un incremento muy moderado de los gastos de personal (1,4%) que contrasta con lo sucedido en el ejercicio anterior durante la pandemia. Al igual que el año 2021, la memoria no facilita ningún tipo de desglose sobre la composición del gasto de personal (variación de plantilla, estructura, incrementos salariales…)”, lamentan.
El sindicato también denuncia que Gobierno de Ayuso dejó de invertir en 2022 un 20% en infraestructuras sanitarias (63 millones de euros) mientras mantiene camas cerradas en plantas, alas y torres de hospitales, “otros en penosa situación, y centros de salud que se caen”.