La bailaora María Pagés dirigirá la primera nave dedicada a la danza en Matadero Madrid

El mapa de direcciones artísticas del Ayuntamiento de Madrid ha quedado completo este miércoles, con el anuncio del fichaje de la bailaora y coreógrafa María Pagés para encargarse de la nueva Nave de la Danza de Matadero Madrid. El área de Cultura municipal ha comunicado el nombramiento para dirigir la Nave 11 de estas instalaciones, donde se desarrollará una de las apuestas de la delegada Marta Rivera de la Cruz para esta legislatura.

La intención es que se convierta en un centro pionero en España con una programación exclusiva y continuada de danza, ya sea en su versión contemporánea como clásica. “Esta iniciativa contribuirá a consolidar Matadero Madrid como un gran contenedor cultural, así como a potenciar este sector de las artes escénicas que lleva tiempo demandando espacios más adecuados para esta actividad”, asegura en un comunicado.

Al frente de este espacio estará Pagés, premio Princesa de Asturias de las Artes en 2022 y precursora de la renovación del baile flamenco a través de la mezcla de tradición y modernidad.

El anuncio de este nombramiento ha llegado acompañado del de la gestora cultural Aránzazu Riosalido para la dirección del Teatro Circo Price. Y la confirmación de que Juan Carlos Pérez de la Fuente dirigirá el Teatro Fernán Gómez Centro Cultural de la Villa, noticia adelantada por Somos Madrid este miércoles.

Riosalido ya ha colaborado con el Teatro Circo Price en el desarrollo de conferencias y producciones como investigadora y documentalista de la historia social del circo. De ella surge la idea original para homenajear el 50 aniversario de la desaparición del Teatro Circo Price de la plaza del Rey, el espectáculo Mil Novecientos Setenta Sombreros, que se convirtió en la cuarta producción más vista de la Comunidad de Madrid en el año de su producción.

Como nueva directora del Teatro Circo Price, potenciará el reconocimiento de este espacio con el fin de consolidarlo como marca Madrid y posicionar a la capital como ciudad de circo, reforzando la cultura circense que ya existe; todo ello, sin olvidar su característica de sala polivalente.