El Gobierno de Almeida estrenó en 2022 un nuevo contrato de recogida de basuras que ha permitido mejorar la frecuencia para la retirada de residuos en las calles. Los servicios municipales pasan más veces a retirar el cartón o el vidrio acumulados en las islas de reciclaje, y el Ayuntamiento está renovando los contenedores para que quepa más basura en su interior.
Sin embargo el contrato también llevaba aparejado un recorte en la frecuencia de recogida de un solo contenedor: el de tapa naranja. La intención municipal es que los ciudadanos vayan separando mejor sus restos y los que van a ese cubo cada vez sean menos, por lo que será necesario pasar menos veces a la semana para recogerlo y así también cumplir con las normativas nacionales y comunitarias, que exigen cada vez mayor reciclaje de residuos.
El cambio no fue anunciado cuando se presentó el contrato, y el área de Medio Ambiente solo advirtió de sus primeros efectos el 1 de enero de 2023, cuando el contenedor naranja dejó de recogerse los domingos. La circunstancia apenas se notó en zonas de la ciudad donde estos contenedores se encuentran en las calles, pero existen 53.000 comunidades de vecinos y decenas de miles de comercios que lo sacaban cada día y que desde ese día no pueden hacerlo.
El resultado fue que muchos ciudadanos no se enteraron del cambio y siguieron depositando sus basuras en las calles los domingos por la noche. Un año después del cambio, las imágenes de basura acumulada los lunes por la mañana seguían poblando muchas calles del centro de Madrid, el distrito donde existen más contenedores naranjas por portal.
Tres días sin recogida en junio
El fin de la recogida dominical era solo parte de un plan más amplio que prevé la retirada progresiva del contenedor naranja. Según el pliego del contrato al que ha tenido acceso Somos Madrid, el próximo mes de junio entrará en vigor la tercera fase de este plan, con otros dos días más sin recogida a la semana, que aún tiene que fijar el Ayuntamiento. Y en mayo de 2025 se pasará a cinco días sin recogida y solo dos de retirada del cubo naranja. El contenedor marrón de residuos orgánicos no cambia y seguirá recogiéndose diariamente.
La oposición está en alerta sobre estos cambios y el tema ocupará parte de la Comisión de Medio Ambiente que se celebra este lunes. En ella Vox preguntará por la forma en la que el área que dirige Borja Carabante intentará revertir “el fracaso” provocado por el nuevo sistema. Y Más Madrid quiere conocer la valoración que hace este departamento municipal “sobre la recogida de residuos en la ciudad de Madrid desde el inicio de los nuevos contratos”.
La falta de recogida los domingos ha provocado, según Más Madrid, que la basura campe a sus anchas “provocando suciedad, malos olores, atracción de plagas y otras molestias para las vecinas y vecinos”, explica el concejal José Luis Nieto Bueno. Además de generar carga extra de trabajo a los servicios de recogida del lunes y a los de limpieza viaria, que tienen que retirar la basura depositada en los aledaños de los contenedores.
Pero la situación, alertan, puede ser peor a partir de junio, con la falta de recogida durante tres días a la semana: “Lo que nos espera a las vecinas y vecinos de Madrid este verano es un caos total, la tormenta perfecta”, vaticina Nieto. Desde su partido aseguran que “sin una buena campaña de concienciación ciudadana” habrá “más basura acumulada en las calles y portales y un aumento de los restos impropios en el resto de cubos y contenedores”. También “plagas y malos olores”.
Desde el partido proponen campañas de concienciación amplias, especialmente en distrito Centro. “No vale sólo con poner una pegatina en el cubo”, añade José Luis Nieto. Y que también lleguen a los comerciantes, algunos de los cuales siguen sacando los cubos naranjas por las noches pese a estar prohibido.
El área de Medio Ambiente asegura que su servicio de inspección está trabajando en informar del mal uso y en levantar actas de inspección. Además, se han colocado pegatinas informativas en los propios cubos donde se advierte de la prohibición y, además, se amenaza con 750 euros de multa.
La falta de recogida de estos contenedores en el último año no ha pasado factura al Ayuntamiento de Madrid en la percepción ciudadana. Al menos en la recogida con la encuesta anual, presentada hace unos días. En ella, los madrileños ponen un 6,3 al servicio de recogida de basuras y contenedores. La calificación es la misma que en el año 2022 y una décima inferior a la registrada en 2021. Así que los nuevos contratos no empeoran pero tampoco están mejorando la opinión de los habitantes de la capital sobre la recogida de basuras, en la que el consistorio gastará 3.525.517.985,97 euros (sin contar IVA) hasta el año 2028, un 70,5% más que con el anterior contrato.