“¿Por qué los médicos son reacios a prescribir terapia hormonal sustitutiva durante la menopausia?”
Buenos días, estoy en tratamiento con Boltín desde hace un año, pero los síntomas, sobre todo sofocos, no acaban de desaparecer. ¿Por qué los médicos son tan reacios a prescribir la terapia hormonal sustitutiva?
Carmen
Los tratamientos hormonales tienen efectos secundarios y es muy importante prescribirlos sólo cuando los beneficios superen con mucho los riesgos. El principal problema de los sofocos tiene una base alimenticia en la mayoría de los casos. Los estrógenos tienen efectos sobre multitud de órganos y tejidos, no sólo a nivel del útero y los vasos sanguíneos.
Cuando nuestros ovarios empiezan a variar su función y las hormonas cambian, la síntesis de estrógenos se hace desde otro lugar, por lo que la alimentación y el tipo de vida que llevamos es más influyente aún si cabe que cuando los ovarios están a pleno rendimiento. De ahí que seamos tan insistentes en que hay que revisar lo que comemos, el ejercicio que hacemos y los niveles de estrés que llevamos, ya que todo eso es fundamental para la síntesis de estrógenos, y para que los sofocos se reduzcan a la mínima expresión.
Antes de recurrir a las hormonas sintéticas (y asumir todos los efectos secundarios que puedan acarrear), deberíamos hacer una adaptación de alimentos e incluso tomar suplementos alimenticios que puedan ayudar más todavía, como el vitex agnus castus, las isoflavonas o sustancias similares, que contribuyen a la regularización estrogénica sin tener los efectos secundarios de los fármacos.
Con esto no quiero decir que “comas mal”, sino que hay alimentos que favorecen a los estrógenos, y otros que no, por eso hablamos de adaptar la alimentación a la etapa vital. Incluso cuando es necesario tomar hormonas sintéticas, una buena alimentación mejora mucho más rápidamente y de forma más efectiva el metabolismo de los estrógenos y mejoran las sintomatología.
Te recomiendo encarecidamente un libro que se llama La revolución invisible, de Marta León, que está dedicado por entero a la alimentación y estilos de vida en la menopausia, y que hará que comprendas mucho mejor el proceso vital por el que estás pasando, que lejos de ser un problema, puede ser muy saludable. Por otro lado, el ejercicio físico regular es también muy importante e influyente: no hay nada que regule mejor el flujo sanguíneo que el ejercicio, que también ayuda a dormir mucho mejor y a tener huesos fuertes. Ojalá pronto puedas disfrutar de tu etapa climatérica con verdadero placer y menos molestias.
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