La batalla judicial de Vox en Murcia continúa. Hoy se ha personado en un acto de conciliación previo a querella Juan José Liarte, uno de los tres exdiputados de la formación regional, expulsados después de quitar de las cuentas de su grupo parlamentario a dirigentes nacionales como Ortega Smith. Quien interpuso la denuncia contra Liarte fue José Ángel Antelo, presidente provincial de Vox, después de que el díscolo apuntara a una supuesta “financiación ilegal del partido”.
“Él considera que es una calumnia” ha señalado el diputado expulsado en un canutazo tras su comparecencia. Antelo reclama a Liarte una compensación económica “desproporcionada” de 20.000 euros. El ex de Vox ha expresado al juez que la petición del presidente provincial de la formación de extrema derecha es “temeraria e injusta” motivo porque el que se niega a aceptarla. Tras el acto de conciliación, Antelo puede hacer efectiva la querella, pero el díscolo no cree que se lleve a cabo.
“En un chat interno del partido denuncié una serie de actos que se estaban realizando de manera irregular y contraria a la legislación para la financiación de partidos” ha recordado Liarte, que ha apuntado que hay un juez de instrucción de Cartagena investigando la denuncia que presentó por esa supuesta financiación irregular.
Representado por Francisco Serrano, ex de Vox en Andalucía investigado por fraude
El exlíder de Vox en Andalucía y candidato en 2018 a la Presidencia de la Junta, Francisco Serrano, es el abogado de Liarte. Serrano abandonó la formación de extrema derecha en Andalucía el pasado julio de 2020 tras conocerse la querella que presentó la Fiscalía Superior de esta comunidad autonóma por un supuesto fraude en subvenciones por una ayuda de 2,4 millones de euros para un proyecto que nunca se ejecutó. También renunció a su acta de diputado en el Parlamento andaluz el pasado 1 de septiembre. En un comunicado, los tres díscolos informaron de que el exjuez y abogado los asitiría “en materias como familia, educación, infancia, discapacidad, igualdad y violencia de género”. La investigación por posible fraude sigue su curso.
Serrano, tras anunciar que abandonaba la miltancia en Vox, criticó que esta formación política se transformara “en cuanto se pisó moqueta”, momento en el que “desde Madrid se decidió cambiar y se impuso un férreo y vertical sistema de organización territorial”. Sostiene que desde entonces “desapareció la confianza”, comenzaron las destituciones y “a la mínima discrepancia se invitaba, a veces vía Comité de Garantías, a tomar la casilla de salida, o se arrinconaba a quienes lo habían dado todo por el proyecto”.