El TSJMU da por válidos los votos de Lorca y el PP mantiene su mayoría absoluta
El futuro político de la tercera ciudad de la Región de Murcia ha estado en el aire por ocho votos, los que podían dar o quitar la mayoría absoluta -y quizá también el poder en el ayuntamiento- al Partido Popular del alcalde Jódar. Y finalmente, la Sala de lo Contencioso-Administrativo del TSJMU ha resuelto desestimar el recurso contencioso-electoral interpuesto por el PSOE, contra el Acuerdo de la Junta Electoral de Zona de Lorca, del pasado 8 de junio de 2015, por el que se aprobó el Acta de Proclamación de Electos en las Elecciones Municipales y se dio validez a los mencionados votos. La sentencia del TSJMU es firme y no cabe recurso alguno, salvo el de amparo ante el Tribunal Constitucional.
Los votos fueron declarados nulos en un principio, debido a que en el mismo sobre blanco de la elección de concejales se introdujeron las papeletas de color sepia de la Asamblea Regional. De ese modo el PSOE obtuvo 9 concejales y el PP se quedó a uno de la mayoría absoluta en el ayuntamiento lorquino, pero la Junta Electoral Central aceptó el recurso de los populares y les dio validez a los votos, por lo que el PSOE perdió el noveno concejal y Jódar obtuvo la mayoría absoluta por un solo voto.
En ese momento, los socialistas declararon: “Los lorquinos merecen obtener una explicación de por qué casualmente ahora, y de manera insólita, la Junta Electoral Central aprueba justo los ocho votos necesarios para que el PP recupere la mayoría absoluta y, al mismo tiempo, desacredita la decisión adoptada, hasta en dos ocasiones, por la Junta Electoral de Zona, quien ratificó el noveno concejal para el PSOE de Lorca”.
Por su parte, el alcalde popular Francisco Jódar, al conocer la decisión de la Junta Electoral que le daba la mayoría absoluta, declaró que la “acogía con humildad y respeto”, y aseguró que gobernará “con mayoría absoluta con los mismos principios de concordia y dialogo manifestados”. Ahora el TSJMU ratifica esa decisión, por entender que quedó clara la voluntad de los ocho electores de votar al PP tanto con la papeleta blanca como con la sepia.