El Gobierno de Navarra continúa con su plan inicial de realizar una “desescalada a la Navarra”, como dijo la semana pasada en el Parlamento foral la consejera de Salud, Santos Indurain. Por ello, el Ejecutivo liderado por María Chivite ya está trabajando con el Ministerio de Sanidad las condiciones para que el conjunto de Navarra pueda pasar a la fase 3 de desescalada, el próximo lunes 8 de junio. Un pase a la siguiente fase, que como en la anterior, se hará manteniendo ciertas restricciones y limitaciones, “con el fin de evitar posibles rebotes de la COVID-19”, han señalado desde el departamento.
El departamento de Salud justifica que Navarra está en condiciones de avanzar en la desescalada basándose en el informe que ya se ha remitido al Ministerio con los datos epidemiológicos de la evolución de la pandemia en los últimos días. Dicho informe recoge que en la última semana se han encadenado hasta cuatro jornadas sin fallecimientos y los casos sintomáticos han sido muy limitados. Además, en la última jornada sólo se ha registrado un caso positivo por PCR. También continúa aumentando el número de pruebas por PCR, hasta alcanzar los 54.778 test acumulados la semana pasada. De esta forma, Navarra se sitúa como la cuarta comunidad autónoma que realiza más PCR (83,9) por cada mil habitantes.
Pese a esta mejoría de la situación, desde el Gobierno foral insisten “en la necesidad de reforzar los sistemas de detección y de reacción del sistema sanitario y en la importancia de que la ciudadanía mantenga un comportamiento responsable para descartar posibles repuntes”. Por ello, se ha planteado, al igual que cuando se solicitó hace dos semanas el pase a la fase 2, la posibilidad de introducir en la fase 3 determinadas limitaciones en los diferentes ámbitos de actividad contemplados en esta fase, adaptando los criterios generales a las peculiaridades del territorio foral.
En aquella ocasión se limitaron medidas como el aforo en los bares y restaurantes, que si bien estaba permitido hasta un 50% por el Ministerio, en Navarra se mantuvo durante la primera semana al 40%; también se optó por no abrir espacios como las bajeras o piperos. En esta ocasión, no se ha dado a conocer cuáles son las especificidades que ha solicitado Navarra de cara a la fase 3 de la desescalada.
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