El alcalde centra su debate sobre la situación en Pamplona en criticar a una oposición “teatral”

¿Cómo está hoy Pamplona? El alcalde de la capital navarra, el regionalista Enrique Maya, ha arrancado con esta pregunta durante esta mañana el debate sobre el estado de la ciudad, el último de la presente legislatura. Por ello, el primer edil ha aprovechado la cita para repasar lo realizado durante los últimos tres ejercicios, para poner en valor que la urbe está mejor ahora que antes de su llegada a la Alcaldía, y que se ha logrado luchar contra la crisis “con nota” a pesar de tener “una oposición estéril”. Estas críticas han centrado su intervención. Maya ha cargado las tintas contra la actitud de unos grupos municipales que, entre otros proyectos (Donapea, el colegio del Seminario...), no han apoyado un presupuesto municipal. “No les entiendo, no sé por qué hacen las cosas así”, ha sentenciado. Y, si no hay un cambio entre los grupos, “seguiremos en solitario”.

“No pueden parar la acción de gobierno y lo saben, y no entiendo por qué quieren hacer parecer lo contrario”, ha insistido Maya. El alcalde ha descrito a los grupos como una oposición “de teatro”, “estrés”, que “genera tensión entre los ciudadanos”. El primer edil ha lamentado que haya tantos cruces de acusaciones y reprobaciones entre los concejales, y se ha referido a las paralizaciones de proyectos realizadas por la oposición como unas “victorias pírricas” que no han logrado frenar la ciudad.

Maya, en un discurso que se ha alargado en torno a 45 minutos, ha destacado que Pamplona está “a la altura de las mejores ciudades de Europa”, por su calidad de vida, su seguridad y su apuesta por la sostenibilidad. En este sentido, ha recordado que Pamplona, que “ya estaba muy bien en 2011”, cuando heredó la Alcaldía de la dirigente de UPN Yolanda Barcina, recibió una deuda de 105,5 millones de euros, que era “asumible” y que, se redujo a 109 a finales de 2013 y que, según espera, será de 102 al acabar este ejercicio. De esta forma, pese a destacar lo realizado, Maya ha evitado cualquier tipo de crítica a la anterior alcaldesa y ha recordado que, entre 1999 y 2009, se realizaron inversiones por valor de 580 millones de euros. Por ejemplo, con la red de Civivox, el Aquabox, las murallas... “y díganme cuál de estas inversiones no era necesaria”, ha retado a la oposición, que en algún momento del discurso ha mostrado su malestar por estas palabras.

El alcalde, con todo, ha destacado como una de las claves de la legislatura que nunca se ha dejado de prestar ninguno de estos servicios, y que se han añadido otros nuevos. Además, como retos para un futuro cercano, Maya ha aportado por la continuidad del festival de Música 360, la conversión de lonjas en viviendas, el derribo de las construcciones Aceros del Sadar, las facilidades para realojos por las obras del Tren de Alta Velocidad o el aumento de las zonas verdes.

Un balance político

Maya también se ha referido a los “errores, que los ha habido”, pero en menor medida. El alcalde ha hecho mención, pero poco más, a los problemas de convivencia en sanfermines o las mejoras en la Policía Municipal. Sí ha hecho más hincapié en el paro, pero para destacar su descenso, y también ha opinado sobre la situación política. En referencia al éxito, por ejemplo, de Podemos en las elecciones europeas, ha señalado que el mérito de la formación ha sido recoger el desencanto popular con la clase política.

Ya centrado en Navarra, ha subrayado que solo partidos de la oposición como PP o Bildu tienen clara su idea para la Comunidad Foral, aunque con los segundos, así como con Aralar, ha decidido “no perder el tiempo”. No así con Izquierda-Ezkerra, Geroa Bai o el PSN, con quienes ha encadenado reproches. Sobre Izquierda-Ezkerra ha considerado que “cada vez sean más Ezkerra y menos Izquierda”; a la portavoz de Geroa Bai, Uxue Barkos, le ha pedido una mayor presencia en Pamplona y que aclare su postura; y al PSN, básicamente, que se aclaren. Y, en general, ha pedido a la oposición, después de esta larga lista de críticas, que se dejen “de espacios huecos. Les invito a que sumen, a que ganemos todos y gane Pamplona”.