De Euskadi al mundo: 30 años en las zonas más vulnerables del planeta
En 1988, un total de 11 ONGs de desarrollo formaron una red en la que cooperar, reflexionar, dialogar y trabajar para que sus actuaciones fueran siempre lo más coordinadas, coherentes, adecuadas y respetuosas posible. Después de tres décadas de trabajo, la Coordinadora reafirma su compromiso “con la defensa de las políticas y de los derechos humanos para todas las personas”, y celebra su aniversario porque '30 años dejan huella'.
Fruto de la demanda y la presión de la sociedad vasca de aquella época, las instituciones públicas comenzaron a destinar presupuesto para cooperación al desarrollo y a diseñar sus propias políticas e intervenciones con ese fin. El objetivo compartido era contribuir a que quienes viven a miles de kilómetros pudiesen tener una vida más digna que no dejara a nadie al margen. Hoy, han pasado 30 años son 80 las organizaciones que forman la red.
'30 años dejan huella' es el nombre de la campaña que la Coordinadora de ONGD de Euskadi ha escogido para salir a la calle al encuentro de la ciudadanía. El objetivo es manifestar el trabajo que tanto instituciones como organizaciones han realizado en las partes más vulnerables del mundo, pero también su influencia en la sociedad en la que actúan. “Decidimos que desde Euskadi debíamos prestar atención a lo que ocurría fuera de nuestras fronteras, para que el dolor ajeno no nos fuese indiferente” han señalado desde la Coordinadora.
De esta manera, afirman que acercarse a los desafíos mundiales del desarrollo y mantener un diálogo con los países empobrecidos permite “incidir en lo global desde lo local, y viceversa. Las ONG de desarrollo sitúan al mundo en Euskadi y a Euskadi en el mundo”.
Para demostrarlo, en 2018 verán la luz diferentes actividades que realcen el camino recorrido por Euskadi en términos de cooperación internacional. De momento, así lo ha hecho un vídeo en el que este recorrido es puesto en valor por voces como las de Jordi Évole, Eva Arguñano, Unax Ugalde o Maribel Salas.
Los participantes del vídeo recuerdan que “lo que ocurre en nuestro entorno está relacionado con otros lugares más remotos”, que “para que unas personas vivan en la opulencia y el exceso, otras tienen que hacerlo en la escasez y el empobrecimiento y sufrir sus consecuencias” o que “si las mujeres y los hombres no tienen los mismos derechos y oportunidades, no es posible cambiar la sociedad”. Por ello, después de tres décadas de proyectos, Euskadi ha logrado numerosos logros aunque, aún, hay muchos retos por delante.
El trabajo no es donación
“La cooperación es más que euros y presupuestos porque contribuye a garantizar derechos fundamentales” afirman desde la Coordinadora de ONGD de Euskadi. De esta manera, quieren realzar los pasos que se han dado tanto en proyectos de cooperación en multitud de zonas empobrecidas del mundo, como en las iniciativas de sensibilización realizadas con la sociedad de Euskadi.
Para poner rostro a la cooperación, se ha lanzado una campaña audiovisual en la que, a través de pequeños vídeos, se descubrirán las “historias con nombre propio que hay detrás de los proyectos de cooperación y cómo, desde Euskadi, se contribuye a transformar sus vidas”, afirman. El primer vídeo ha visto la luz este mes, mostrando la realidad de los altos valles bolivianos en los que la ONGD Zabalketa ha desarrollado una técnica para captar niebla y convertirla en agua apta para el consumo y la agricultura.
El resto de actividades que se llevarán a cabo en Álava, Bizkaia y Gipuzkoa se detallarán en las próximas semanas. De momento, se pretende hacer partícipe a la sociedad para profundizar en la labor de las ONG de desarrollo, “acercar las realidades de los países empobrecidos, denunciar las causas que provocan pobreza y desigualdades y mostrar las alternativas para lograr una sociedad más justa y solidaria”, declaran desde la Coordinadora.