En este blog publicamos los artículos y cartas más interesantes y relevantes que nos envíen nuestros socios. Si eres socio/a puedes enviar tu opinión desde aquí. Consulta nuestras normas y recomendaciones para participar.
¿Hacia otro 15M?
No estuve en París en mayo del 68, y por lo que me han enseñado, me alegro. No corrí delante de los grises, porque un par de veces me dieron un porrazo y aprendí. Eso sí, estuve en el quince eme y no llegaba a entender a la multitud abigarrada.
No había demasiada profundidad de pensamiento, más diría yo, no había pensamiento ni doctrina, sólo personas que estaban en mejor situación que la actual. Repámpanos¡¡¡¡, ni nos representan ni es posible que lo hagan. Las organizaciones se disuelven en el brillo de la satisfacción de la carestía en forma de trabajo en ellas. Punto. Eso es un partido político. Yo estaba militando en uno minoritario de corte trostkysta. Ni por esas, un partido es un triturador de ilusiones.
Jamás se acerquen a ellos, salvo que pretendan un trabajo y no les importe alejarse de su ética por obtener un futuro fuera del quince eme. Si entras, no puedes huir, no puedes abandonar por lo feo que es lo de dentro. Te expulsarán y te difamarán.
Yo defiendo a trabajadores en los juzgados y soy pobre, pero sé que lucho de tú a tú y resuelvo problemas. Incluso me hace feliz. A veces me enfado con jueces, otrora con tribunales y aún me dejan ejercer.
Si fuera posible un sesenta eme, tan enorme como el descontento, volvería poca gente de entonces. Tal y como es mi parecer, al quince eme no le importa votar a vox, por ejemplo.
Iluminados, llamados a enseñar, notables que están como las mercancías marxistas, lejos, fetiches alienados, podéis ir tranquilos, nos arreglaremos sin vuestro valor de uso.
Menos mal que no hay meses de sesenta días, sería insoportable otro sesenta eme. Por favor, que los que tienen luces luzcan y alerten a estos leves de lo grave que es su intrascendencia.
Amigo Sancho, hemos de prescindir de estos extraños.
Me llamo Félix, me apellido Esquide. Estoy resignándome. Quizá me deje comprar alguna vez.
No estuve en París en mayo del 68, y por lo que me han enseñado, me alegro. No corrí delante de los grises, porque un par de veces me dieron un porrazo y aprendí. Eso sí, estuve en el quince eme y no llegaba a entender a la multitud abigarrada.
No había demasiada profundidad de pensamiento, más diría yo, no había pensamiento ni doctrina, sólo personas que estaban en mejor situación que la actual. Repámpanos¡¡¡¡, ni nos representan ni es posible que lo hagan. Las organizaciones se disuelven en el brillo de la satisfacción de la carestía en forma de trabajo en ellas. Punto. Eso es un partido político. Yo estaba militando en uno minoritario de corte trostkysta. Ni por esas, un partido es un triturador de ilusiones.